El gobierno y el sector empresarial deben firmar un pacto que permita incentivar el empleo en el país o que, en su defecto, se mantengan los puestos de trabajo existentes, para impedir que los efectos de la crisis mundial aumenten la exclusión social.

El gobierno y el sector empresarial deben firmar un pacto que permita incentivar el empleo en el país o que, en su defecto, se mantengan los puestos de trabajo existentes, porque de lo contrario los efectos de la crisis económica mundial aumentarán la exclusión social en la República Dominicana.

La propuesta es de Danilo Medina, quien fuera precandidato presidencial del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), quien consideró que una de las peores repercusiones de la debacle financiera global será la pérdida de empleos y la falta de financiación internacional para las áreas productivas locales.

En ese sentido, consideró que las autoridades deberían disponer lo más pronto posible del fondo de US$500 millones que le ofreció el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), como parte de un programa de sostenibilidad del crecimiento, y que sería traspasado a las empresas por intermediación de la banca nacional.

En ese contexto, se declaró contrario a que el gobierno utilice esos recursos para gastos corrientes.

Los países como el nuestro tienen que defender su mercado, y precisamente el dilema nuestro es el tamaño del mercado, teniendo una población pequeña y, de ésta, un alto porcentaje que vive en la exclusión.

El dirigente político compitió en 2007 en las primarias del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) con el también precandidato Leonel Fernández.

Luego, al perder en esa competencia política, declaró que fue derrotado por los recursos del Estado me ganó el Estado.

Medina consideró que es muy temprano para evaluar las ejecutorias del segundo mandato consecutivo de su ex contrincante.

Sin embargo, recordó que la gestión de Fernández se inició con una crisis financiera de grandes magnitudes.

Propuestas a largo plazo. Medina, quien es economista y fungió de secretario de la Presidencia hasta 2007, cuando decidió impulsar su precandidatura, identificó en el Almuerzo del Grupo de Comunicaciones Corripio la plataforma de un modelo de gobierno a su imagen y semejanza.

En ese sentido, explicó que el turismo, la agropecuaria, las pymes y los préstamos a personas de bajos ingresos serían las herramientas que utilizaría para impulsar el desarrollo.

De acuerdo con sus explicaciones, declararía al turismo como la locomotora del desarrollo, porque es el sector con más potencial para el crecimiento.

Asimismo, establecería acuerdos con los inversionistas turísticos, para priorizar la construcción de las infraestructuras que demanda ese renglón de la economía.

Para impulsar la agropecuaria facilitaría la inversión en invernaderos, de manera que sea mejorado su rendimiento con la tecnología, a fin de satisfacer la demanda del mercado interno.

En la escala de financiación priorizaría a las pequeñas y a las medianas empresas, a cuyos propietarios les ofrecería la asesoría necesaria para que puedan administrar sus negocios.

La última pata de su mesa de desarrollo es la financiación a los más pobres, a los que no tienen garantías que les permitan ser sujetos de crédito en la banca.

De lo que se trata es de la creación de un banco de los pobres, explicó el dirigente político en el encuentro.

Un modelo para invertir en la gente

Danilo Medina consideró que se debe implementar en el país un nuevo modelo, que privilegie la inversión en la gente, porque no es suficiente que los gobernantes se conformen con las estadísticas que hablan del crecimiento de la macroeconomía.

Ese nuevo esquema de desarrollo debe contener la posibilidad de un primer empleo, de educación, y debe atender a la familia para evitar su desintegración.

La ausencia de esos tres elementos es lo que está contribuyendo al incremento de la pobreza y la marginalidad en el país, reflexionó.

Sin embargo, atribuyó a la Secretaría de Educación hacer el esfuerzo para aumentar las horas de clases en las escuelas. Asimismo, dijo que un Estado que piense en el futuro de su gente tiene que hacer las inversiones que fueren necesarias para mejorar su calidad de vida.

El dirigente político se preguntó hacia dónde irá el país, si se sigue con una población en la que más del 50% tiene empleos informales. Destacó que la urgencia es crear empleos para la juventud, porque ese es el sector más excluido.

Al preguntársele por qué la clase política no ha sido más diligente en crear mecanismos que permitan a la gente salir de la pobreza, respondió que cada cual tiene su librito, su agenda particular de trabajo.

Hay quienes creen que si hay crecimiento económico, éste arropa a todo el mundo, pero no basta con crecer y tener tasa de inflación baja para que disminuya la pobreza.