La Internacional Socialista de hoy no es ni remotamente lo que fue en el siglo pasado cuando grandes líderes mundiales y regionales formaban parte de su estelar matrícula.
Pasaron a la historia los días gloriosos en que esa organización reunía un elenco de figuras como los premios nobel de la paz Willy Brandt y Simón Peres, gobernantes de sus respectivos países, Israel y Alemania, François Mitterrand de igual manera en Francia, Mario Soares en Portugal, Bettino Craxi en Italia, Felipe González, España, Carlos Andrés Pérez en Venezuela, Rodrigo Borja de Ecuador, Olof Palme, asesinado primer ministro de Suecia, Rubén Berríos, líder independentista puertorriqueño, entre otros.
El gran anfitrión de esos históricos encuentros de la Internacional Socialista lo era nada menos que el Dr. José Francisco Peña Gómez, líder del PRD y convertido en el dominicano con mayores relaciones internacionales, respetado y admirado en las principales capitales del mundo.
La influencia de la IS ha mermado considerablemente. Su eterno secretario general, el chileno Luis Ayala, a pesar de sus ingentes esfuerzos no ha podido encauzar esa institución que hoy se encuentra casi en el ocaso. Isabel Allende prestigia esa entidad y pronto será su presidenta.
La decisión de expulsar al Frente de Liberación Nacional Sandinista fue inoportuna, Peña Gómez hubiera buscado un bajadero
Sin embargo, hay que valorar la celebración de la reunión del Consejo Mundial de la Internacional Socialista en Santo Domingo, la presencia del presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, y de Danilo Medina, primer mandatario dominicano, y es justo también destacar la tarea del Ing. Miguel Vargas Maldonado en aras de mantener con vida esa organización, aprovechando su condición de canciller de la República.