El ex administrador de la Empresa de Generación Hidroeléctrica Dominicana (EGEHID) Máximo D’oleo denunció que cinco centrales hidroeléctricas del país han sufrido pérdidas directas por más de RD$6,000 millones, debido a errores operacionales.

 El ingeniero D’ oleo  dijo que esos errores se produjeron  luego que la Corporación Dominicana de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE) dispusiera la cancelación de cientos de técnicos calificados para sustituirlos por activistas políticos sin preparación ni experiencia.

D’ oleo  reclamó al Congreso Nacional y al Colegio de Ingenieros, Arquitectos y Agrimensores (CODIA) que dispongan una investigación para establecer responsabilidades en torno a los graves daños que han afectado a las centrales hidroeléctricas.

Dijo que las autoridades  de la CDEEE han mantenido en secreto estos acontecimientos para evitar que la opinión pública  exija una rendición de cuentas.

Aseguró que las centrales hidroeléctricas de Imeno, Jigüey, Aguacate, Nizao/Najayo y el contraembalse Las Barias, en Valdesia, han resultado severamente dañadas debido a errores y negligencias en el manejo de esa unidades antes, durante y después del paso de las tormentas Noel y Olga.

Indicó que la central de Jimenoa, en Jarabacoa, salió de servicio por errores operacionales en septiembre del año 2005 y se mantuvo fuera del sistema durante 17 meses, generando pérdidas por RD$318 millones, sin que se estableciera ninguna responsabilidad.   Agregó que durante el paso de la tormenta Olga, una operación inadecuada permitió que el túnel de la central se llenará de lodo y arena sacándola de servicio y produciendo más pérdidas en generación de energía.

En el caso de la central Jigüey, explicó que el generador número 2 de la central hidroeléctrica ha estado fuera de servicio desde  noviembre de 2005, es decir durante dos años  y dos meses, debido también aun error de operación. Estimó que las pérdidas totales ascenderán RD$3,200 millones, sumando el monto total de la energía no servida y el costo de reparación del generador que estará fuera de servicio por un año más.