Daños  lluvia sobre producción de
alimentos han sido devastadores

Daños  lluvia sobre producción de<BR>alimentos han sido devastadores

En el caso del plátano, la principal vianda de consumo en el país, las plantaciones fueron barridas en más de un 95 por ciento por las inundaciones y los vientos en las provincias de Barahona y Baoruco.

Por MARIO MÉNDEZ
Los daños ocasionados a la producción de alimentos agrícolas por la tormenta tropical Noel han sido desvastadores, sobre todo en todo lo que tiene que ver con viandas, vegetales, cereales  y algunos frutales, como aguacates.

En el caso del plátano, la principal vianda de consumo en el país, las plantaciones fueron barridas en más de un 95 por ciento por las inundaciones y los vientos en las provincias de Barahona y Baoruco, y en más de un 70 por ciento en Azua. En esa zona hay unas 160 mil tareas plantadas de este cultivo.

En Baní también se ha perdido más de un 25 por ciento de la producción de plátano.

En la zona del Cibao Central las plantaciones también habían sufrido hasta ayer considerables daños, aunque en menor medida. Desde el  Noroeste  se había reportado hasta ayer al mediodía que unas 17 fincas bananeras estaban inundadas. Los daños a las plantaciones de banano de Mao también fueron significativos. Los daños a la producción de otras viandas, como yuca, yautía, ñame y batata también han sido significativos en las diferentes regiones del país.

Los daños a la producción de viandas se ocurren en un momento en que ante el alza de otras fuentes alimentarias, como son los derivados del trigo por los aumentos de los precios internacionales de esta materia prima, se había planteado como alternativa la sustitución de esos alimentos por los productos agrícolas, cuya producción ha sido castigada por los fenómenos naturales que han afectado al país.

Además, en el caso del plátano está el agravante de que estos problemas coinciden con la entrada del invierno, época del año en que la producción tienda a bajar.

Ígualmente, los daños a las plantaciones de vegetales han sido de grandes proporciones. Sólo en en la zona de Ocoa, desde Nizao hasta Rancho Arriba, se había reportado la destrucción de la producción de  90 invernaderos, el 80 por ciento de los instalados en esa zona.

Igualmente se  reportó que 180 mil tareas de vegetales sembradas en Moca habían sido arrasadas por las inundaciones.

En el caso particular  del tomate, sólo en el Suroeste se dañaron 25 mil tareas de semilla a trasplante de tomate industrial, lo cual hará que se posponga la cosecha, porque obligaría a plantar nuevos semilleros, con todo lo que esto implica en inversiones. La producción de tomate para ensalada también fue diezmada.

Ha habido también grandes daños en la producción de granos. La producción de arroz ha sido parcialmente afectada y sólo en San Juan habrá que preparar unas  140 mil tareas de tierras para la siembra de habichuelas, lo cual implica una inversión de unas 200 millones de pesos.

Las lluvias y las brisas también causaron grandes daños a las plantaciones de aguacate, sobre todo en el Sur del país, región en la que hay grandes plantaciones.

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