Tener en su bolsillo un historial de cuatro títulos de campeón en la pelota dominicana, sin duda alguna que tiene un gran peso y una importancia mayúscula en la carrera de Gerónimo Berroa con los Leones del Escogido.

Berroa debutó en la pelota local en la temporada de 1985-86 con los Tigres del Licey y allí jugó por dos años antes de pasar al conjunto escarlata en la campaña 1987-88.

Allí Berroa demostró una capacidad productiva impresionante, ganando tres campeonatos consecutivos entre el torneo 87-88 y el 89-90.

También fue miembro del conjunto campeón rojo de 1991-92, antes de que los Leones se metieran en una racha de 18 años sin conquistar una corona.

En su carrera de 12 años en la pelota dominicana, Berroa acumuló buenos números, registrando 19 cuadrangulares y 168 remolcadas junto a un promedio de bateo de .247.

Tuvo una temporada, la de 1993-94 en la que bateó para .363, pero perdió el título de promedio ante Alex Arias, de las Aguilas Cibaeñas, que bateó para un robusto .371.

Ese mismo año remolcó 29 carreras disparó tres cuadrangulares en la que ha sido su mejor campaña regular en la pelota local.

Pero luego nos topamos con la producción alcanzada en apenas seis temporadas con el Escogido para otro escarlata, el toletero David Ortiz.

Ortiz jugó campañas corridas desde 1997-98 y hasta el 2003-04 para los rojos.

Al Big Papi se le podría llevar en contra que no aportó una corona de campeón para los Leones en los años que jugó en el país.

Sí fue a tres finales, una contra el Licey y dos contra las Aguilas, pero en las tres ocasiones los Leones fueron vencidos.

Pero en temporadas regulares, Ortiz hizo en seis años más de lo que logró Berroa en números de poder y su promedio de bateo fue casi 30 puntos superior al del hombre llamado “Señor Enero” en los finales de la década de gloria de los felinos.

En apenas 828 turnos al bate, Ortiz disparó 24 cuadrangulares y remolcó 152 carreras, acompañado de un promedio de .279.

En dos oportunidades, Ortiz conectó al menos cinco vuelacercas con el Escogido (1999-00 y 2000-01) y cinco veces pasó de las 20 remolcadas en una campaña.

Su mejor año lo registró en el 2002-03, cuando bateó .351, con cuatro vuelacercas y 23 impulsadas.

Por eso, aunque no fue campeón en la pelota dominicana con los Leones, podemos decir que Ortiz fue más productivo que Berroa. 

Cara o cruz

Romeo González

En esta comparación me tengo que quedar con Berroa porque fue más determinante para sus equipos en nuestro béisbol y contribuyó a títulos”.

Daniel Rufenacht

Pocos jugadores han alcanzado el nivel de producción de Gerónimo Berroa en playoffs en LIDOM. Fue clave en tres campeonatos del Escogido”.