JUPITER, Florida (AP).- Aunque apenas tiene 28 años, el dominicano David Ortiz ya siente la edad cayéndole encima. Por eso el bateador designado de los Medias Rojas de Boston quisiera jugar más partidos en primera base este año, para evitar que el óxido se apodere de su corpulento físico.

Ortiz ocupó la inicial en 45 de los 128 partidos en los que vio acción la temporada pasada. En el resto sirvió de bateador designado, y puso los mejores números ofensivos de su carrera: 288 de promedio, con 31 cuadrangulares y 101 remolcadas.

Esa producción, y su costumbre de pegar batazos claves que decidieron varios partidos a favor de Boston, le valieron seria consideración para el premio de Jugador Más Valioso de la Liga Americana, terminando quinto en la votación.

«Le dije a ellos (Boston) que me dieran un poquito más de juego en primera», comentó Ortiz a la AP.

«No es tan bueno cuando uno tiene que estar jugando designado nada más, la habilidad se te va», agregó.

Sostuvo que su deseo es dividir la mitad de la campaña entre primera base y bateador designado, pero reconoció que la palabra final recae en la gerencia del club.

También señaló que el equipo cuenta con un buen inicialista en Kevin Millar, quien también puede jugar en tercera y los jardines.

«Que me deje un ratito ahí para compartir», señaló.

Ortiz atribuyó la buena campaña que tuvo el año pasado a que estuvo libre de lesiones.

Indicó que la buena salud y la tremenda campaña ofensiva que tuvo se reflejaron en la alegría que demostró en el terreno.

«Dicen que todos los equipos me quisieran tener alrededor porque yo traigo mucha armonía por mi personalidad como soy», señaló. «Y eso es un punto a favor de uno».