David Ortiz tuvo una temporada difícil en 2009 y a pesar de que pudo recuperarse en la segunda mitad, sostuvo que se decepcionó con su producción.

   “No estoy satisfecho de los números finales, pero para la forma en que comencé me atrevería a decir que sí aunque a nivel general no estoy satisfecho”, dijo Ortiz en una entrevista para el programa radial Tiempo de Juego de la emisora dominicana Supra 101.7 FM.

   Ortiz, de 33 años, tuvo un promedio de .238, con 28 jonrones y 99 remolcadas en 150 partidos con los Medias Rojas de Boston. Sin embargo, en los primeros dos meses de la campaña, el bateador designado apenas sumó un vuelacerca.

   “Tuve muchas limitaciones al principio del año, preocupaciones familiares y muchas otras cosas. Llegué al punto de que me sentía confuso sobre lo que quería hacer”, agregó.

   Entre las preocupaciones que le afectaron estuvo la aparición de su nombre en reportes de que se encontraba en la lista de los 104 jugadores que arrojaron resultados positivos en pruebas de dopaje en 2003.

   “Lo de la lista me afectó muchísimo, tengo que admitirlo. Pero en un momento lo vi como un negocio, porque aparecía una gente y señalaba a alguien en un periódico (The New York Times) y luego nadie se atrevía a dar la cara. Fui a MLB (Grandes Ligas) y también al sindicato e inicialmente nadie sabía nada”, explicó.

   Ortiz indicó que el sindicato, posteriormente, le informó que estaba en la lista y ofreció una rueda de prensa en la que indicó que no había consumido esteroides, solo suplementos alimenticios comprados en las tiendas GNC.

   “La prueba más clara de que yo siempre he estado limpio es que del 2004 para acá me han hecho 24 pruebas de esteroides y nunca he dado positivo a nada”, aseveró.

   Ortiz tiene un año más de contrato con los Medias Rojas y una opción para 2011 por parte del club.

El dominicano sonó en varios rumores de cambio durante su mala racha de 2009 pero sostuvo que recibió el apoyo del propietario John Henry. 

Las frases

David Ortiz

Cuando me estaba yendo peor y se dijo mucho que yo era una pieza de cambio, el dueño me esperó en el túnel del Fenway Park y me dijo ‘el dueño de este equipo soy yo, esos comentarios de que te van a cambiar son cuentos, sal a hacer tu trabajo’”

En el invierno voy a hacer mi rutina  y lamentablemente eso no incluye jugar béisbol invernal”.