POR CLARA SILVESTRE
Poeta, artista, y con un espíritu de pensador y buscador incansable, este joven artista se propone desarrollar su carrera pictórica en su tierra, luego de que por espacio de ocho años viviera en Italia. Y aunque reconoce que al principio tuvo temor de exponer, porque sus trabajos no son necesariamente paisajes, se siente seguro de lo que hace y quiere presentar. Su mundo es ese que logra crear con imágenes, palabras que van llenas de sentimientos y mucho de pensamiento propios de su intuición y amor al estudio.

En sus trabajos que componen la exposición titulada Tocando el hiperjuicio quiere, como ha expuesto, tocar el hiperjuicio, al tiempo de despertar en cada persona un sentimiento diferente, el hiperjucio es el juicio del inconsciente, y el juicio del inconsciente es más poderoso que el consciente, porque cuando éste se acomoda, el inconsciente dice: ¡Oye, espera..

David Taveras considera que el abstraccionismo es la fuerza que mueve los sentimientos y la línea que usa cada artista para expresar algo, de ahí que entienda que existe lo que se llama abstraccionismo expresivo. El abstraccionismo tiene muchas prendas. Lo que mueve los sentimientos se llama color y los ismos, son sentimientos volubles y palpables.

Presentará sus nuevos trabajos a mediados de año, fecha en que ha sido invitado a exponer en un Museo en Italia, además de participar en la Feria Internacional de Florencia. Allá, participó en algunas colectivas, aunque estuvo más inmerso en talleres de arte.

Destaca que a pesar de que en Italia se toma mucho en cuenta lo que el artista representa en su país, se siente satisfecho porque tuvo la oportunidad de exponer en cuatro ocasiones.

Para lograr esto que expongo es necesario tomarse un largo y extenso tiempo, y vivir dentro de una misma vida, muchas vidas, leer mucho. Mi trabajo evoca eso que te llevan a ser una y otra cosa. Mi trabajo evoca eso que somos realmente, agrega.

En estos momentos, David Taveras está interesado en desarrollar su carrera artística primero aquí, su país, al tiempo de continuar internacionalizando su trabajo, me considero un buscador. El crítico Odalis Pérez me enfrasca en lo que es el arte poético. Yo soy mi obra hasta cierto punto, el abstraccionista no debe o debe hacer lo que le plazca, es su condición. Mi obra es yo o no al mismo tiempo. Me considero un poeta.