Nos ganó la delincuencia

Definitivamente los ciudadanos dominicanos hemos perdido la paz. La delincuencia nos ha arropado. Ya no se está seguro en ninguna parte, a ninguna hora. Todas las personas con las que uno habla de los casos de atracos, violaciones y muertes, tienen  familiares o amigos cercanos que han sufrido la pesadilla. Cuando se leen los diarios o la gente se entera por los medios electrónicos de los casos que han convertido nuestro país en un estado fallido, solo se preguntan: ¿Y cuándo me tocará a mí? Porque esto es una lotería.

El pasado sábado le tocó a mi familia. En momentos en que salían de la casa de una de mis hijas fueron sorprendidos por tres delincuentes que se movilizaban en dos motocicletas. En este caso no hubo disparos porque no pusieron resistencia. Pero, que alguien me diga si las autoridades responsables le van a devolver la vista a la   ingeniera Francina Hungría o las vidas a tantas almas víctimas de la delincuencia.

De ahí que República Dominicana esté copiando de Centroamérica, donde a falta de justicia, queman vivos a los ladrones y asesinos que agarran en las calles.