La protección de la infancia en línea, si bien es cierto podemos presentar importantes logros alcanzados, como lo evidencian los programas y eventos de trascendencia internacional desde hace más de dos décadas, y que han dado lugar a nuevas leyes que han venido a regular su protección.
Tristemente podemos afirmar que desde el 2015 a la fecha, ese valioso trabajo ha ido en declive. Un marcado desinterés que necesariamente va en detrimento de la prevención para un uso seguro y responsable del internet por los menores de edad. Pareciera que los han dejado abandonados a su suerte, y es por ello que invitamos a dar la cara en su favor.
Según publicación de Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), en Directrices sobre la protección de la infancia en línea para los encargados de formular políticas, 2020, “En 2019, más de la mitad de la población mundial utilizaba Internet. Los menores de 44 años conforman el grueso de los usuarios y se registran niveles de uso igualmente elevados en las personas de edades comprendidas entre 16 y 24 años y entre 35 y 44 años. A nivel mundial, uno de cada tres niños utiliza Internet (de 0 a 18 años). En los países en desarrollo, los niños y los jóvenes encabezan la utilización de Internet y se estima que esta población se duplicará con creces en los próximos cinco años. Las nuevas generaciones están creciendo con Internet y la mayoría se conectan a ella con tecnologías de redes móviles, especialmente en el hemisferio sur.”
Según encuestas realizadas, citadas por la UIT, más del 60% de los niños y jóvenes establecen diariamente contactos en salas de conversación. Tres de cada cuatro niños en línea están dispuestos a compartir información personal sobre ellos mismos y sus familias a cambio de bienes y servicios. Uno de cada cinco podría ser elegido como víctima de un depredador cada año.
Antecedentes en la protección de la infancia en línea.
I Congreso Mundial contra la Explotación Sexual de los Niños, realizado en Estocolmo, Suecia en agosto de 1996. En dicho Congreso, se definieron tres formas de explotación sexual comercial: Prostitución infantil; trata y venta de niños con fines sexuales dentro de un mismo país y entre países; y pornografía infantil.
En lo que respecta a pornografía infantil se estableció que “debido a que las redes cibernéticas de información brindan un acceso fácil y económico a fuentes de pornografía infantil, esta se ha aumentado en los últimos años y resulta cada vez más difícil combatirla mediante soluciones legislativas apropiadas”, lo cual, a la fecha, nos plantea la misma preocupación.
El II Congreso Mundial fue en Yokohama, Japón, diciembre 2001, en el cual se evaluaron los progresos alcanzados a partir del primer Congreso, y entre otros compromisos, se dispuso “adoptar medidas adecuadas para abordar los aspectos negativos de las nuevas tecnología, en particular la pornografía en la Internet, reconociendo al mismo tiempo el potencial de las nuevas tecnologías para la protección de los niños contra la explotación sexual comercial y el intercambio de información y el establecimiento de vínculos entre aliados”.
El III Congreso Mundial contra la Explotación Sexual Comercial de Niñas, Niños y Adolescentes, Rio de Janeiro, Brasil, noviembre 2008, dentro de los ejes temáticos, en lo concerniente a los nuevos escenarios y modalidades en que se presenta la explotación sexual comercial, se incluyó la “pedofilia y pornografía, crímenes de internet y nuevas tecnologías”. Declara el establecimiento de reglas firmes de seguridad en Internet que se propaguen tanto en sitios web, como dentro de las comunidades.
Adicionalmente a los Congresos antes citado, en la Cumbre Mundial sobre la Sociedad de la Información, celebrada en Ginebra del 10 al 12 de diciembre de 2003, y en Túnez del 16 al 18 de noviembre de 2005, los líderes de la comunidad internacional encargaron a la Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), la creación de confianza y seguridad en la utilización de las TIC´s, y en sus resultados se reconoció específicamente, la necesidad de proteger a los niños y los jóvenes en el ciberespacio.
En el compromiso de Túnez, se indica ¨el papel de las TIC y en la mejora del progreso de los niños¨ y la necesidad de reforzar ¨ las medidas de protección de los niños, contra cualquier tipo de abuso y la defensa de sus derechos en el contexto de las TIC¨. Estos compromisos se establecieron tomando como referencia la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño, aprobada en 1989,de la cual la República dominicana es signataria, y como Estado parte, está obligada a proteger al niño (a los efectos de esta Convención todo ser humano menor de 18 años), contra todas las formas de explotación y abusos sexuales y formar con éste fin, en particular, todas las medidas que sean necesarias para impedir, entre otras, la “explotación del niño en espectáculos o materiales pornográficos”.
La República Dominicana ha ido adecuando su legislación a las recomendaciones emanadas de los conclaves antes citados, como podemos citar el Código del Menor, Ley No. 136-03; Tráfico Ilícito de Migrantes y Trata de Personas, No. 137-03; Ley sobre Crímenes y Delitos de Alta Tecnología, No. 53-07, entre otras leyes. Pero la respuesta legislativa no es suficiente, adicional a ésta, debe encaminarse la elaboración un plan nacional de ciberseguridad enfocada en la infancia, para combatir todo tipo de abusos contra los menores, que son los más vulnerables. Una estrategia de concientización y educación nacional, con capacidad de procesar a los infractores.
No es un secreto que el crimen organizado de explotación sexual infantil en línea genera miles de millones de dólares al año a dicha red, al proveer contenidos inapropiados a sus pedófilos consumidores, y al igual que cualquier otro entramado criminal se vale de cómplices dentro de la estructura del poder, y los países preferidos por ellos, son los de baja o ninguna persecución.
De cara a la Unión internacional de Telecomunicaciones (UTI)
La UIT es el organismo especializado de las Naciones Unidas para las tecnologías de la información y la comunicación – TIC.
En el año 2009, en el marco de su estrategia de ciberseguridad, lanzó la iniciativa “Seguridad de la niñez en línea” (child on line protection), y hace un llamado a todos los Estados miembros de la UIT a poner en marcha estrategias de atención integral para el establecimiento de mecanismos de protección de la infancia y el uso seguro de las TIC en los países. En este sentido la UIT propone que a nivel nacional se promueva una convergencia entre las instituciones y las partes interesadas en la seguridad de la infancia en línea.
Atendiendo a las recomendaciones de la UIT, en ese mismo año, 2009, el Instituto Dominicano de las Telecomunicaciones (INDOTEL) lanzó el programa Internet Sano, el cual estuvo exitosamente dirigido por la Ing. Amparo Arango, equipo al que luego, quien suscribe, fue integrada como encargada del plan de ciberseguridad para niños y adolescentes en la República Dominicana.
Para ese entonces, la página del INDOTEL contaba con un portal solo para temas educativos referente al uso seguro del Internet. Dentro de las diversas tareas del proyecto, estaban las conferencias a los estudiantes en sus respectivos planteles educativos, para motivar a navegar con entusiasmo, pero con seguridad; la Mesa de Trabajo sobre ciberseguridad de NNA, una mesa interinstitucional e interdisciplinaria mediante la participación de los directivos principales de las instituciones claves en la protección de la infancia y de las TICs: CONANI, PROCURADURIA GENERAL DE LA REPÚBLICA, DICAT, UNICEF, DESPACHO PRIMERA DAMA, MINISTERIO DE EDUCACION e INDOTEL; una línea telefónica para denuncias de ciberacoso, u cualquier otro atentado, e igualmente esto mismo, la denuncia, a través de la página web del INDOTEL. Se imprimieron las Directrices de la UIT para la protección de la infancia en línea, del 2009, Directrices para niños, padres, tutores, educadores, la industria y los encargados de formular políticas, y que ya han sido actualizadas al 2020.Un trabajo muy ambicioso.
El 31 de octubre de 2011, se celebró un histórico evento con la Alianza Global de Sistemas Móviles (GSMA), un seminario taller sobre ciberseguridad para NNA en el país, que aún aparece la información en la página web de la GSMS.
La GSMA en febrero del 2008, anunció el lanzamiento de la Alianza Móvil contra Contenidos de Abuso Sexual Infantil en febrero de 2008, a fin de “hacer frente a la amenaza del mal uso de las redes de banda ancha con contenidos de abuso sexual infantil”. “El objetivo de la Alianza es evitar el uso de la telefonía móvil por parte de individuos u organizaciones que desean consumir o aprovecharse de los contenidos de abuso sexual infantil”, enfatizó la entidad de carácter mundial, y que representa los intereses de los operadores de redes móviles en todo el mundo, unos 750 representantes de la industria. Su último evento registrado en su página Web fue en agosto de 2015, lo que nos da la razón, en un evidente abandono del compromiso que les corresponde.
INDOTEL
La página del INDOTEL borró todo evidencia del gran trabajo e inversión en beneficio de la infancia en línea realizado a través del programa INTERNET SANO, el cual muchos recordarán, y lamentablemente son decisiones que no se entienden, y que perfectamente nos bajan de nivel en lo que respecta en el Índice Global de Ciberseguridad (GCI), referencia confiable que mide el compromiso de los países con la ciberseguridad a nivel global, para crear conciencia sobre la importancia y las diferentes dimensiones del problema.
El nivel de desarrollo o compromiso de cada país se evalúa a lo largo de cinco pilares: Medidas legales, medidas técnicas, medidas organizativas, desarrollo de capacidades y cooperación, y luego se agrega en una puntuación general. La República Dominicana en el índice 2020,a nivel global, en un rango de 182 países evaluados tiene una calificación de 75.07%, para una posición No. 65, y a nivel regional, de las Américas, cuenta con la posición No. 6, en un rango regional de 19 países, lo que podemos decir que íbamos regular.
En el portal “Enlaces’, cuenta con un subportal de la GSMA, que no aporta nada, no establece con qué objetivo, y que bien pudiera aprovecharse para hacer cumplir o dar seguimiento a las “Directrices sobre la protección de la infancia en línea para la industria 2020” de la UIT.
El Centro Nacional de Ciberseguridad (CNCS)
El CNCS fue creado mediante el Decreto No. 230-18, del 19 de junio de 2018, para implementar la Estrategia Nacional de Ciberseguridad 2018-2021, lo cual lo que le restaría es rendir informe, porque ya agotó legalmente su tiempo de vigencia.
Según señala su página web, es una “Entidad dedicada al desarrollo de la ciberseguridad, al fortalecimiento de la confianza digital del usuario dominicano y a la protección de la infraestructura crítica y tecnológica del Estado dominicano.” No tiene nada publicado que sea alusivo a la protección de la infancia en línea.
Finalmente, ¿A que aspiramos?
- A que todos podamos navegar en la Internet con seguridad, lo que incluye privacidad, legalidad, respeto, etiqueta, y de manera muy especial la infancia, cuyo daño, si no lo prevenimos, sería irreparable, quedando afectados además la familia, y toda la sociedad en general.
- A que el INDOTEL, como regulador de la Industria de las telecomunicaciones, retome su compromiso con los niños, niñas y adolescentes, consumidores de las TIC’s, y de la cara. Que se le explique al país el por qué de su abandono al plan de ciberseguridad, a la educación para prevención y su indiferencia con las Directrices de la UIT. Que se retomen los contenidos del Internet Sano, un trabajo hecho con esmero, que dio buenos frutos, y que lleva un reconocimiento especial para la Ing. Amparo Arango.
- Que se defina qué se va a hacer con el estatus legal del Centro Nacional de Ciberseguridad, cuya estrategia era 2018-2021.
- La ciberseguridad demanda una respuesta mundial, sobre todo cuando se trata de proteger a los ciudadanos digitales más jóvenes y vulnerables, los NNA, y contrario a lo esperado, se observa un inexplicable abandono, cuando más protección estaríamos demandamos.