El padre Fernando Polanco, provincial de la Compañía de Jesús, utilizó su sermón para señalar las situaciones infernales producto de la violencia, la corrupción, la droga, el consumismo y el sufrimiento de tantas personas.
Rechazó a quienes pretenden vender a la República Dominicana como un paraíso, cuando cada quien debe tratar de hacerse su propio paraíso. El jesuita presentó la Segunda Palabra de Jesús en el Gólgota, en la que se apoyó para expresar que hay una falta de esperanza que intenta matar la pasión de amar.