LEONORA RAMÍREZ S.
l.ramírez@hoy.com.do
En los últimos seis meses se ha elevado en un 16 por ciento el costo de las viviendas debido al incremento de los materiales de construcción, lo que se ha traducido en la reducción de las ventas inmobiliarias en alrededor de un 40 por ciento.
La afirmación la hicieron los directivos de la Asociación de Constructores y Promotores de Viviendas (ACOPROVI) y de la Asociación de Empresas Inmobiliarias, quienes coincidieron en que la situación descrita atenta contra esos sectores de la economía.
Jaime González, presidente de ACOPROVI, refirió que a partir de noviembre de 2007 comenzaron a registrarse alzas en la varilla y el cemento, las que en algunos casos atribuyó a la especulación.
A fines del año pasado, refirió, el atado de varilla costaba RD$33,000 y ahora se vende a RD$60,000, casi el doble.
Es cierto que ha habido inflación, que tenemos el incremento del petróleo, ¿pero la incidencia es tan grande que hay que aumentar tanto ese producto?, en realidad lo que tenemos es especulación y un aprovechamiento de la coyuntura política.
González destacó que también subió el precio del cemento en alrededor de un 25% en el referido período.
Costos de las casas. Con relación a la incidencia de esa situación en el valor de las unidades habitacionales dijo que entre enero y abril éstas se incrementaron en un 12 por ciento, pues un inmueble que tenía un valor de RD$3 millones ahora se ofrece en RD$3.3 millones y RD$3.4 millones.
Con las nuevas alzas que han tenido la varilla y el cemento estamos hablando de que de enero a mayo el costo de las viviendas se encareció en un 16 por ciento.
Santos, presidente de la Asociación de Empresas Inmobiliarias, dijo que esos aumentos han reducido las ventas entre un 30% y un 40%, lo que afecta la rentabilidad del sector.
Sobre los fondos de pensiones
El presidente de la Cámara Dominicana de la Construcción manifestó que existe una fuerte resistencia, inclusive en el sector bancario, al financiamiento de viviendas con los fondos de pensiones, aunque se trata de una inversión muy segura.
Diego de Moya Canaán refirió que en esa coyuntura tiene que entrar el Estado, para que implemente mecanismos que permitan el acceso a esos recursos.
Asimismo, destacó que en Chile se utilizan de manera diversa los fondos de pensiones, porque se invierten hasta en el Bolsa de Valores de Nueva York.
Pero en el caso de la República Dominicana consideró que una parte debe estar destinada al sector habitacional, porque es seguro y tiene un carácter social indiscutible.
Jaime González, presidente de la Asociación de Constructores y Promotores de Viviendas (APOCROVI), refirió que las condiciones que existen para acceder a los fondos de pensiones son prácticamente imposibles de cumplir por los empresarios de ese sector.
Entre los requerimientos citó el que las compañías de construcción estén auditadas tres años antes por una firma internacional y luego deben ser calificadas por una empresa calificadora de riesgos.
Aunque González destacó que el sector ha conversado con la Superintendencia de Bancos para ver de qué forma es más fácil conseguir esos fondos, advirtió que se debe ser cuidadoso porque se trata del dinero de los trabajadores que andan cerca de los RD$55,000 millones.
En varias ocasiones, diversos sectores han propuesto que los fondos de pensiones de los trabajadores sean invertidos para viviendas, pero la idea no agrada a los gremios de trabajadores, dada la desconfianza que generaría la inversión.
Mientras tanto, ese dinero sigue congelado en los bancos nacionales.
La ley 87-01 establece que los fondos de pensiones pueden invertirse en depósitos a plazo y otros títulos, letras o cédulas hipotecarias, títulos de deudas de empresas públicas, acciones de oferta pública y viviendas, entre otros.