De la diplomacia comercial a la política comercial

De la diplomacia comercial a la política comercial

Vladimir Pimentel

A propósito de las palabras del señor ministro de Relaciones Exteriores, Don Andrés Navarro en el almuerzo mensual correspondiente al mes de Mayo de la Cámara Americana de Comercio, me es grato escuchar el “nuevo” y  a la vez obligado enfoque, de las representaciones dominicanas en el exterior y su inclinación hacia la Diplomacia Comercial, como eje de articulación de las funciones y responsabilidades en otros países.

De esta forma proponemos algunos puntos de reflexión, que necesariamente han de orientar y reformular los tan relevantes planteamientos del señor Ministro:

  1. La diplomacia comercial se refiere al soporte de los representantes diplomáticos en el exterior, para la internacionalización empresarial, fundamentado principalmente en el comercio exterior y los flujos de inversión extranjera directa. Por lo tanto, hablamos de manera implícita de una serie de servicios a ser ofrecidos por el Estado para las actividades comerciales en los mercados internacionales.
  2.  Tal vez valdría la pena ir pensando en movernos más allá de la Diplomacia Comercial e integrar en los abordajes de las funciones ministeriales la Diplomacia Económica como concepto más amplio y de mayores implicaciones políticas de cara a los intereses económicos nacionales.
  3.  Referirnos a Diplomacia Comercial nos conduce a la aceptación de la relevancia de la intervención del Estado en la actividad comercial empresarial, aunque sea como empuje o soporte. Esto debemos verlo no solo en términos de representación, si no que a la vez debe tener sus orígenes en políticas públicas muy bien definidas desde el Estado a nivel nacional y de cara a los mercados extranjeros.
  4.  Lo delicado de los asuntos comerciales y los riesgos de implicaciones políticas importantes de estos, requieren un personal capacitado y conocedor de los temas de promoción internacional, mercadeo, representación, regulación comercial, exportaciones, importaciones, aduanas, investigación de mercados, inteligencia comercial, acceso a mercados, barreras comerciales, controversias comerciales, organismos internacionales y en términos generales sobre política comercial, entre otros.
  5.  Es necesario que la República Dominicana pueda contar con una Política Comercial explícita (no implícita), clara, medible que permita apuntar hacia los objetivos y metas en estos ámbitos, tanto para las instituciones públicas relacionadas como el sector privado. De esta manera el servicio exterior comercial podrá contar con los elementos para el accionar, la priorización de mercados, concentración de esfuerzos, y evasión de trabajos innecesarios o insustanciales en términos comerciales. Además de una mayor eficiencia en el uso de los recursos nacionales.
  6.  Finalmente, debemos referir la importancia de la coordinación inter-institucional a favor de una política comercial congruente y una representación diplomática con objetivos claros y coordinada. Hablamos de una política comercial integral, coordinación local y respuestas unidireccionales en el exterior. Por ejemplo, lo que yo llamo el trípode de la política comercial dominicana, a saber: Dirección de Comercio Exterior y Administración de Tratados Comerciales (DICOEX), el Centro de Promoción de Exportación e Inversiones (CEI-RD) ambas entidades vinculadas al Ministerio de Industria y Comercio (MIC) y la Comisión de Negociaciones Comerciales (CNNC), vinculada al Ministerio de Relaciones Exteriores (MIREX).

La política comercial debe preceder el accionar del servicio comercial en el exterior, o la llamada Diplomacia Comercial.

 

 

Publicaciones Relacionadas

Más leídas