Hoy 
Por FIOR GIL
El presidente de la Conferencia del Episcopado Dominicano, monseñor Ramón Benito de la Rosa Carpio, calificó de “injusto e incompleto” el informe del Departamento de Estado en el cual los Estados Unidos reitera que los dominicanos discriminan a los haitianos.
Rosa Carpio tras negar que en el país se discrimine a los haitianos dijo que el informe es incompleto porque en el mismo no se ofrecen detalles sobre los servicios que estos reciben en los hospitales públicos nacionales, la cantidad de empleo que tienen y la colaboración de las escuelas y universidades en donde se encuentran miles de jóvenes estudiantes del vecino país.
Al mismo tiempo lamentó que en los Estados Unidos no se preocupen por garantizar un buen trato a los inmigrantes dominicanos en su territorio. Al mismo tiempo resaltó la preocupación de la Iglesia Católica y el trabajo que desarrolla a través de la Pastoral Haitiana.
Monseñor de la Rosa Carpio se refirió al tema al responder pregunta luego de presentar la Carta Pastoral emitida por la Conferencia del Episcopado con motivo de la celebración del 163 aniversario de la Independencia Nacional en la cual no se trató el tema haitiano, porque según explicó recientemente los obispos lo enfocaron en un amplio mensaje sobre toda la situación de “nuestros hermanos haitianos”.
Dijo que el informe de los Estados Unidos, que muchas veces obedece a reportes irreales que hacen algunas instituciones desde la República Dominicana no hace justicia al comportamiento de la comunidad dominicana a favor de los haitianos. Dijo que si en ese informe se enfocara todo lo que hace las universidades dominicanas por los estudiantes haitianos, no sólo las católicas sino en general, sus resultados fueran muchos más justos.
El informe sobre los derechos humanos que cada año presenta el departamento de Estado afirma que hay discriminación contra los haitianos y que se cometen abusos contra la niñez.
Citan varios casos en los que ciudadanos dominicanos atacaron a inmigrantes haitianos en represalias por distintos actos de violencia ocasionados por descendientes haitianos y que algunos de ellos resultaron muertos.
Monseñor de la Rosa Carpio afirmó que la comunidad internacional no se preocupa por ayudar a los haitianos, pero sin embargo quieren que la República Dominicana se haga cargo de su problemática.
