SANTIAGO. Monseñor Ramón Benito de la Rosa y Carpio pidió hoy al presidente electo Danilo Medina no tener miedo a la  hora de actuar con las dos tareas principales que tendrá que enfrentar como es la delincuencia  y  la corrupción administrativa.

Consideró que a Medina  hay que protegerlo de los que solo buscan bienestar propio, recordándole que él es presidente de todos los dominicanos.

“Habrá mucha gente que  irá donde Danilo Medina a buscar su tajada porque voto por él, pero el mandatario electo tiene que recordar que está para gobernar por y para el bien del país, no para el beneficio de un  grupo. No estoy dando un consejo pero estoy recordando un principio común. Que el Estado es para el bien común  y sobre todo para los más desposeídos”, sostuvo de la Rosa y Carpio.

Pidió a Dios que al recién presidente le dé fortaleza  y sabiduría  para practicar programas que se puedan ejecutar en  bien del pueblo.

Expresó que la gran masa dominicana no importa donde este congregada, sea en asociaciones empresariales o políticas,  deben darse la mano aun en las peores circunstancias y advirtió que “la violencia nos está arropando tanto, que ha llegado hasta a el exceso  verbal”.

“Todo reino que este dividido se cae, no importa el que sea, político o de la sociedad y hasta en las familias. Eso vale para todos. Si estamos unidos acabaremos con el narcotráfico, la violencia, los problemas sociales, etc”, manifestó Ramón Benito de la Rosa.

De la Rosa y Carpio, al concluir la  homilía en la misa de Corpus Cristi, expuso además que la alta militancia política  debe unificarse   en aras de preservar la paz.

En la misa  que presidió  alabo a los hombres y mujeres que cuidan a su familia y pidió a Dios que perdone a esos padres que abandonan la familia y que se olvidan de que los niños y adolescentes son cuerpos que no pueden ser asesinados antes de tiempo.

«Necesitamos alabar a Dios para que nos proteja de tantas maldades. Hay que comulgar para que el cuerpo de Cristo nos una.», dijo.

La misa de Corpus Christi fue celebrada en el Estadio Cibao de Santiago, en donde miles de feligreses vestían de blanco. Según los entendidos, este año ha superado la cifra de asistencia en comparación con los anteriores.