Robert De Niro, persona non grata. Para millones de cinéfilos de todo el mundo, Robert De Niro es el prototipo del hombre italiano. Sin embargo, según un artículo del diario británico The Guardian, a muchos norteamericanos descendientes de italianos la imagen de tipo duro que proyecta el actor y los papeles en éxitos de taquilla como “El padrino II” no les caen nada bien.

Es más, trascendió que una influyente organización italo-norteamericana le solicitó al primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, que cancelara el plan de Italia de declarar a De Niro ciudadano ilustre. Se trata de la Orden de los Hijos de Italia en Estados Unidos, con sede en Washington y con 600.000 miembros y donantes, que se mostró indignada de que el actor “haya hecho una carrera protagonizando a gángsters de descendencia italiana”. “No hizo nada para promover la cultura italiana en Estados Unidos y lo consideramos responsable de dañar las reputaciones colectivas tanto de los italianos como de los norteamericanos de ascendencia italiana”, dijo el grupo en un comunicado.