De paso y repaso

De paso y repaso

[b]EL CASANDRA: LA DESPEDIDA EL ESPECTACULO[/b]

Mal hace aquel que pone malas intenciones donde no debe. La producción de la ceremonia de los Premios Casandra puede ser valorada dentro del marco de la excelencia, por su agilidad, vistosidad y buen gusto.

Todas las figuras artísticas que desfilaron esa noche ante nuestros ojos hicieron un trabajo digno de su estatura ante nuestros ojos y ante nuestros oídos… Felicitamos a Aidita Selman por lo logrado.

[b]FELIZ VINICIO LORA[/b]

Lució toda la energía, la seguridad y la formación que tiene en la ceremonia de entrega de los premios que conceden Acroarte y la CND. Al momento de su discurso –sin ningún fallo, ni espina oral recibimos la convicción de que se trabajó con transparencia, responsabilidad y amor para que esa noche fuera, tal y como fue, memorable.

[b]LA DIRECTIVA EN PLENO[/b]

Mas, los miembros de Acroarte, ex presidentes y miembros de la actual directiva, también estuvieron a la altura del evento, tanto en el vestuario como manteniendo la sobriedad y el buen humor que primó en el evento. La membresía que estaba esa noche en la Sala Eduardo Brito se caracterizó por la elegancia y los trajes y estilos adecuados para la ocasión.

[b]LA FIESTA DE TODOS[/b]

A las fiestas siempre se acude animado, en disposición de gozar y en esta en que los Premios Casandra son un incentivo mayor, había además el anhelo de los nominados de ser los seleccionados como ganadores, el público e invitados especiales de disfrutar y en el caso de los dominicanos y seguidores de la fauna artística (a la que se refirió Zoe Saldaña en tono de chanza) el deseo de que sus favoritos recibieran la estilizada estatuilla de doña Casandra Damirón.

[b]MICHEL, NO MICHAEL[/b]

Debería ser una regla respetada por los cronistas dominicanos la de nombrar y escribir el nombre de nuestro gran artista y mejor músico Michel Camilo, sin A, tal y como él lo estableciera hace unos años para facilitar la pronunciación en otros idiomas. Si en lugar de poner Michel, ponemos Michael, cualquier persona que no sea de aquí, entenderá que no se trata del mismo.

[b]FIESTA DE LA IDENTIDAD[/b]

Esa fue la fiesta de todos en Acroarte. Sobre todo en el segundo número musical donde las artes se unieron para celebrar. Africa, España y el Caribe se unieron en las voces de Luis Días y Milly Quezada cuando interpretaban al maestro Luis Rivera “cuando bailo un buen merengue qué bonito es…”, cada uno con su estilo para “Ella”. Igualmente pasó con la coreografía en la que se unieron los estilos clásico, contemporáneo y folclórico y con el arreglo de Manuel Tejada donde se sintieron la rumba española, los colores de la música clásica europea y los tambores y la percusión de los negros africanos que heredamos.

[b]HOMENAJES[/b]

Perdió la palabra el maestro Yaqui con el homenaje que le rindiera Acroarte en nombre de su “Mamá Casandra” y sobre todo la euforia y la entrega que tuvo con él el público presente en la ceremonia de entrega de los Premios Casandra. La voz portentosa de Anthony Ríos tronó en la Sala Eduardo Brito. Igual cuando expresó su punto de vista en torno a Pavel y la nominación compartida, que cuando recordó su larga marginación de estos premios y finalmente sorprendiendo con una paronimia con “eme” que terminó siendo “heme aquí”, no se hizo esperar la risa y el aplauso a su ya bien reconocido ingenio para el uso del español.

Chespirito, Roberto Gómez Bolaños ¿cómo separarlo de sus personajes? Se confundió al estilo del Chavo cuando le dedicó el premio a Casandra (y luego dijo bajito “ah no, que ella está allá arriba” y terminó la frase con la mano levantada hacia el cielo, pero terminó bien cuando habló de que tenía 75 años como los de la Cervecería Nacional Dominicana. A la cervecería le salió bonificación con Olga Guillot cuando dijo que en cualquier país que iba y en cualquier bar o restaurante siempre pide “una Presidente”, su cerveza favorita.

La Guillot se deshizo en elogios para Niní Cáffaro. “Amo esa voz de este hombre que es maravillosa” y para Milagros Germán (que estuvo regia).

Doña Florinda, que en la vida real no se descuida con su cabellera negra, tuvo palabras emotivas para su marido e ingeniosas para nosotros al darnos las gracias por recibirla con esa gran fiesta de carnaval… ¿sería que su hotel estaba en el Malecón?

[b]LAS PROTESTAS…[/b]

Estuvieron a pedir de boca, lo mismito que en la entrega de los Oscars. Aquí además de Anthony hicieron de las suyas Angel Muñiz, Juan Basanta y William Liriano.

Este último le pidió a los viejos que le abran la puerta a los jóvenes. Juan Basanta pidió menos violencia doméstica y política contra la mujer dominicana (al frente estaba su mamá) y aún no podemos establecer si fue que la licorera no le pagó a Angel, ¿le dijeron que sí y después que no? Lo de que Joseíto no tenía pasaje para venir de Nueva York, era una protesta o era una pezuña del Niche (como le llamaba la soberana Casandra Damirón).

[b]UN SUEÑO[/b]

A partir de ahora voy a asumir como cierto eso de que se “vale soñar”, pues nunca me imaginé ver juntos en un mismo escenario y menos compartiendo canciones y voces a Juan Luis Guerra, Johnny Ventura, Pochy Familia, Wilfrido Vargas, Ramón Orlando, Maridalia Hernández, Milly Quezada, Fernando Villalona y Luisito Martí.

Cuando la gente dice que los sueños son posibles debió imaginar que algún día, veríamos al maestro Jorge Taveras y Guillermo Cordero haciendo coro y coreografía en un escenario con estos artistas…

[b]SE ME QUEDO ALGO[/b]

Manuel Tejada, te la comiste. ¡Qué música!

Publicaciones Relacionadas

Más leídas