¿De qué nos sirven los 600 de Sammy?

¿De qué nos sirven los 600 de Sammy?

JUAN FREDDY ARMANDO
Tenemos que relanzar a la República Dominicana. Y no hay mejor momento que éste, en que contamos con tantas glorias qué exhibir, y tantas cosas malas del pasado qué superar. Porque la imagen de una país, como he escrito ya varias veces aquí en esta columna, depende de lo que hagan o dejen de hacer sus nacionales. Debemos mostrarle al mundo nuestras glorias, que son muchas para el trescuarto de isla  tan pequeño que habitamos.

Una ocasión propícia se acerca para aprovechar. Es que a nuestro Sammy Sosa apenas le faltan unos cuantos batazos para llegar al privilegiado círculo de los bateadores que han llegado a los 600 jonrones. Entonces, ese día no puede dejarse pasar así como así. Hemos de tener preparado el homenaje allá y aquí, poniéndose de acuerdo con su equipo, los Chicago Cubs, para engrandecer ese momento. Si hay que estar dos tres, cinco y hasta la cantidad de juegos que sea necesario para esperar ese hecho, debemos hacerlo. Esperar a que tenga los 599, preparados para hacer destacar ese gran acontecimiento mundial.

¿Qué conseguiremos con eso? Pues enseñarle al mundo nuestra cara positiva y noble en ese y otros muchos campos, como es el deporte. Ese hecho influirá no sólo en la visión que los nacionales otros lares tengan sobre nuestra patria, sino también sobre nosotros mismos. Que mucha falta nos hace elevar nuestra autoestima, mejorar el pensamiento que tenemos el país al que pertenecemos. Y eso influirá, aunque parezca increíble, en una disminución de la delincuencia, de los robos, de los asesinatos, de las malas palabras en los medios de comunicación, del mal comportamiento de nuestros jóvenes en sus escuelas, de la falta de respeto a los valores y símbolos patrios.

De la misma manera, debemos promover a nuestros viejos héroes deportivos, musicales, literarios, pictóricos, para profundizar la conciencia en los extranjeros y nacionales sobre lo bueno que hemos tenido y tenemos: Johnny Pacheco, Juan Luis Guerra, Angela Carrasco, María Montez, Guillo Frómeta, Johnny Ventura, Manuel Jiménez, Michael Camilo, Francisco Casasnova, Franklin Mieses Burgos, Pedro Mir, Juan Bosch, Tomás Hernández Franco, Juan Marichal, Felipe Alou, Osvaldo Virgil, Félix Sánchez, Wanda Rijo, Juana Arrendel, son glorias de ayer y de hoy de la cultura y el deporte que podemos usar en spots de televisión, documentales,  campañas de radio, prensa, cine y otros medios, con fines de promocionar a República Dominicana como un país que produce algo más que espaldas mojadas, prostitutas, bebedores de ron, bandoleros y otras lacras que han dado una mala imagen nuestra en el exterior.

De esa manera podremos lograr que cuando un francés o un inglés o norteamericano o mexicano piense en Santo Domingo, las imágenes que pasen por su mente como una cinta cinematográfica imaginaria sean las de esos acontecimientos, esas glorias, esas maravillas,  que juntas compondrán en conjunto su imagen de República Dominicana. Y todo eso incidirá también sobre la mala conducta de algunos  dominicanos que viven en el exterior, y de esa forma evitemos que un extranjero no piense lo que pensó un teatrista colombiano que nos visitó recientemente. Dijo que venía con miedo porque pensaba que los dominicanos de aquí eran como los de su vecindario en New York: revoltosos, bullosos, peleadores y malos vecinos. Al llegar a nuestro país, se encontró con la decencia, honorabilidad, afecto y solidaridad de quienes lo tratamos, y cambió completamente su idea sobre el dominicano, y nos manifestó frecuentemente su felicidad de estar aquí y sus ganas de quedarse.

De modo que preparemos el homenaje a Sammy con motivo de sus 600 jonrones, que será un homenaje a nosotros mismos. Y el valor más importante no es el del acto mismo, que total es algo que puede ser pasajero y fugaz, sino que eso sirva como inicio de una campaña nacional e internacional para catapultar nuestra nación y ganar un lugar cada vez más respetable y admirado. De esa manera, podremos hacer mejores negocios y conseguiremos más ventajas en nuestros tratos económicos, diplomáticos, comerciales, culturales o de otra índole.

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Creativo y Asesor de Marketing
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