Expertos nacionales y extranjeros debatieron ayer los problemas urbanos del país en un seminario en cuya apertura el ministro de Economía, Planificación y Desarrollo (MEPyD), Isidoro Santana, consideró que hay que afrontar con decisión el ordenamiento urbano, en particular la alta concentración poblacional metropolitana.
El taller “Implementación de la nueva agenda urbana de la República Dominicana” puso en contexto a los participantes sobre los procesos e instrumentos y las líneas de acción prioritarias que lleva a cabo la Dirección General de Ordenamiento Territorial, cuyo titular, Ángel Ramírez, tuvo a cargo el cierre, con la presencia del presidente de la Federación de Municipios (Fedomu), Rafael Hidalgo.

El consultor Sergio Blanco, de ONU-Hábitat, refirió los objetivos específicos y la dimensión del taller a los expertos, académicos, empresarios y representantes de la sociedad civil reunidos en el hotel Crowne Plaza.

Omar Rancier, de la Dirección General de Ordenamiento Territorial, enunció los procesos e instrumentos que esa entidad impulsa a nivel nacional, mientras que Mizoocky Mota, de la misma entidad, explicó el plan de acción, y Carlos Barillas, de ONU-Hábitat, facilitó los debates.

En su discurso, Santana explicó que la atención que demanda la metropolización es especial debido a que esa población necesita para sus actividades gran cantidad de infraestructuras, servicios y espacios que impactan la capacidad de las metrópolis para satisfacerla y regenerarla, provocando desequilibrio en el desarrollo humano.

Aclaró empero que planificar el ordenamiento territorial metropolitano no implica abandonar otras ciudades y territorios del país, sino lo contrario, abarcarlos a todos, para descontinuar la generación de flujos migratorios desordenados hacia las metrópolis.

Dijo que un ejemplo de la necesidad de construir ciudades sostenibles para la calidad de vida ciudadana es que mientras se estima que para el año 2050 el 80 % de la población mundial residirá en asentamientos urbanos, ya en el país el 75% reside en ciudades y poblados.

En relación con las áreas urbanas, sugirió consolidar las “ciudades intermedias”, que son puentes de conexión entre zonas rurales y metropolitanas, y el espacio en el cual la población rural accede a servicios y equipamientos básicos.