Cuando se escucha hablar de inteligencia artificial, algunos podrían remontare a las escenas de la famosa película protagonizada por Arnold Schwarzenegger. Donde las máquinas toman el control del mundo desplazando al ser humano, o en la Matrix donde los humanos son utilizados como baterías generando electricidad para la inteligencia artificial.

El miedo a sentirse desplazado por las maquinas no es algo propio de esta década. Desde los inicios de la revolución industrial y la introducción de las maquinarias en las fábricas, se ha pensado que podrían llegar a reemplazar al a ser humano.

El término inteligencia artificial ha estado presente desde hace ya algunos años en el mundo tecnológico. Lo que diferencia al cerebro humano es la capacidad que tiene de “pensar” o tomar decisiones basadas en emociones.

En la actualidad con el impresionante desarrollo de softwares, aplicaciones y dispositivos “inteligentes” la tecnología ha tomado cierto grado de inteligencia, gracias a esta inteligencia artificial.

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La reciente introducción de aplicaciones como Chatgpt y empresas con infinidad de recurso económicos dedicadas únicamente al desarrollo de inteligencia artificial sus posibles ramificaciones. Se ha llegado suponer que nos enfrentamos ante una competencia real a la creatividad y el pensamiento del ser humano.

¿Sería posible que la inteligencia artificial pueda “pensar” por el ser humano? ¿Deberíamos estar preocupados?

Definitivamente sería muy conservador subestimar el impacto de la inteligencia artificial en el presente y lo que podría alcanzar en el futuro no muy lejano. Tampoco sería descabellado imaginar ciudades inteligentes donde solo por citar un ejemplo, el transporte y servicios básicos podrían funcionar de manera autónoma, brindando mayor eficiencia y seguridad. Todo esto controlado por una unidad central basada en inteligencia artificial. El reto estaría en controlar los posibles riesgos asociados.

Definitivamente llegará el momento donde el ser humano tendrá que decidir en que tanto poder y autonomía quedará en manos de esta llamada inteligencia artificial.

Dijo Elon Musk uno de los fundadores de la empresa OpenAI “La IA será pronto más inteligente que cualquier ser humano. Debe ser regulada ya podría convertirse en unos de los mayores riesgos de la sociedad”