La toma de decisión de la Reserva Federal de Estados Unidos (EEUU) será el punto de atención esta semana cuando los mercados reflexionen sobre las minutas de la reunión de junio del Comité Federal de Mercado Abierto que serán publicadas.

Después de la reciente sugerencia de Ben Bernanke, presidente de la Fed, que este puede comenzar a reducir su programa de alivio cuantitativo este año, el detalle de la discusión será muy buscado por los mercados que han estado preocupados sobre lo que puede parecer el panorama posterior al QE. En particular, ellos estarán buscando pistas sobre la programación de dicho movimiento.

“Es posible que un número de los participantes haya expresado optimismo citando la fortaleza de la demanda del sector privado a pesar de la pronunciada resistencia de la política fiscal”, dijo John Zhu de HSBC.

El indicador de confianza de la Universidad de Michigan, emitido el pasado viernes, será vigilado por cualquier señal de que el sentimiento del consumidor esté descendiendo de su reciente alza observada posterior al 2007.

“La confianza es probable que sea volatil por el resto del año, reflejando corrientes cruzadas de influencias positivas y negativas”, dijo Zhu. Él cita los mercados inmobiliario y laboral como en ascenso, mientras que la reciente volatilidad de los mercados financieros es una posible influencia al descenso.

Gran atención será enfocada en la data de junio de China que será publicada durante la semana. Las cifras de suministro de dinero serán analizadas, con los mercados esperando que estas reflejen el constreñimiento monetario del mes pasado.

Los números del comercio internacional, así como del crédito y la inflación, mostrarán si la crisis de efectivo ha comenzado a afectar. “El nivel de los préstamos en la moneda local de China y los indicadores de liquidez serán los medidores más importantes de la temperatura de la segunda mayor economía del mundo”, dijo Eimear Daly de Monex Europe.

El anuncio de la tasa del Banco de Japón el martes es probable que mantenga en espera la política. Los precios del consumidor siguieron sin cambio en mayo, habiendo bajado desde el pasado octubre.

Los recientes PMI indican que los precios han aumentado en junio, así que el objetivo de los “abenómicos” de alcanzar un 2% de inflación dentro de 2 años parece que sigue en curso.

El banco central de Brasil también tiene un anuncio de política esta semana. Su dilema: la inflación está elevándose, implicando que las tasas es más posible que se muevan en ascenso, pero eso arriesga a asfixiar adicionalmente el titubeante crecimiento. La data de la producción industrial de la eurozona del mes de mayo puede mostrar que la situación ha tocado fondo.

El balance comercial de Alemania puede decepcionar, ya que este enfrenta la competencia de Japón, mientras el crecimiento en un importante destino de exportación, China, comienza a frenarse. “Con el consumo privado estando sólido, la velocidad de la recuperación alemana depende de las exportaciones, y hablando más ampliamente, la espina dorsal industrial”, dijo James Knightley de ING.

Reino Unido verá que la data en relación al balance comercial podría iluminar el desempeño de la exportación. Las cifras del sector de la construcción, de las ventas minoristas y del sector industrial, también están próximas a ser publicadas.

Estas pueden proporcionar ciertas indicaciones de qué esperar del PIB del segundo trimestre, que parece probable que dé un rendimiento positivo.