El presidente de la Fundación Equidad y Justicia Social (Fejus), Fidel Lorenzo Merán, dijo ayer que el presidente Danilo Medina, sentó un mal precedente al desacatar una sentencia del Tribunal Constitucional, al darle la nacionalidad a 750 ciudadanos a haitianos.

“Destaparse el Presidente de la República en su despedida a festinar la nacionalización de más de 700 nacionales haitianos en un solo decreto es una afrenta al sistema judicial y constitucional dominicano”, dijo Lorenzo quien recomendó sea revisado por las nuevas autoridades.

Explicó que si no se ajusta al dictamen de la sentencia 168-13, debe ser derogado. Citó el caso del capellán Abigail Bien-Aimé, quien dijo se hace pasar por general militar, sin tener ningún rango.

“Lo que hizo el Presidente está en contraposición a la sentencia 168-13 del Tribunal Constitucional que estableció el “ius solis” y el “ius sanguinis”, para adquirir la nacionalidad y en la naturalización de inmigrantes me parece que fue exagerado el número que la obtuvo mediante decreto”.
Destacó que otorgar la nacionalidad dominicana debe ser un asunto muy serio y bien depurado, “se le da los que reúnan méritos para convertirse en ciudadanos dominicanos”.

La raiz. Fidel Lorenzo recordó que en el año 2017 en el Tribunal Constitucional había una posición bastante firme que fue apoyada por el entonces presidente de la Junta Central Electoral, Roberto Rosario y que muchos criticaron, alegando que se había despojado de documentos a haitianos, cuando en verdad lo que pasó fue que muchos haitianos falsificaron documentos locales.