Fort Meade. EFE. La vista preliminar sobre el caso del soldado Bradley Manning y su papel en la mayor filtración de datos reservados de la historia de Estados Unidos, los que llegaron a la red WikiLeaks, concluyó ayer con sólidas pruebas en su contra y la petición de la defensa que no se solicite una pena mayor de 30 años.
Bradley Manning se enfrentó con la misma compostura de las últimas seis jornadas de audiencia a los alegatos de su abogado defensor, David Coombs, y del representante de la acusación por parte del Gobierno estadounidense, el metódico y técnico capitán Ashden Fein.