El Defensor Pueblo, Pablo Ulloa, calificó de preocupantes los casos de violencia ocurridos en las últimas dos semanas en los recintos policiales de la provincia San José de Ocoa y el Distrito Nacional, en los que dos ciudadanos han pedido la vida.
En ambos casos, patrullas policiales han apresado a ciudadanos que posteriormente han sido reportados como fallecidos ante un aparente uso excesivo de la fuerza.
“Hay que evitar que sigan ocurriendo acciones de violencia en los recintos policiales y ya hemos iniciado investigaciones en procura de garantizar los derechos de las personas que hayan sido apresadas por patrullas de la uniformada”, afirmó Ulloa.
Agregó que la Policía Nacional está en la obligación de garantizar la vida, integridad física y los derechos de los ciudadanos que son detenidos para fines de investigación.
Lee más: Policía Nacional instalaría cámaras en destacamentos, según Diego Pesqueira
Añadió que la Secretaría General del Defensor del Pueblo cuenta con el Departamento de Investigación para realizar las pesquisas en ambos casos.
Espera informe forense caso de Ocoa
El Defensor del Pueblo se mantiene pendiente a la entrega de los resultados de la autopsia que realizó el Instituto Nacional de Ciencias Forenses al cadáver de José Gregorio Custodio, quien murió, supuestamente, tras ser golpeado por los miembros de una patrulla policial.
“Esta institución, en el ejercicio de sus funciones, estará concluyendo su investigación para derivar de ella su posición oficial sobre el suceso en el que perdió la vida el referido ciudadano, por tratarse de un confuso incidente que involucra a miembros de la Policía Nacional en Ocoa”, sentenció.
Enfatizó que la Primera Adjunta y el Departamento de Investigación de la Secretaría General del Defensor del Pueblo sólo están a la espera de recibir el informe forense para concluir con el proceso y comunicar a la sociedad los resultados y la posición del Defensor sobre el caso.
Sobre el Defensor del Pueblo
El Defensor del Pueblo es una autoridad independiente, un ejecutor que no se encuentra sujeto a ninguna limitante más que la del apego a la ley. Su característica es la neutralidad. El Defensor del Pueblo tendrá autonomía funcional, administrativa y presupuestaria.
El objetivo esencial del Defensor del Pueblo es salvaguardar las prerrogativas personales y colectivas de los ciudadanos, plasmadas en nuestra Constitución, en caso de que sean violadas por funcionarios de la administración pública.
Asimismo deberá velar por el correcto funcionamiento de la administración pública, a fin de que ésta se ajuste a la moral, a las leyes, convenios, tratados, pactos y principios generales del derecho.