El déficit comercial acumulado (exportaciones menos importaciones) de bienes del país con Estados Unidos y el resto del mundo, desde 1999 hasta julio del 2016 –incluyendo el período de ejecución del DR-Cafta de marzo de 2007 hasta este último mes-revela la necesidad impostergable de emprender reformas de conversión de la plataforma industrial y agraria y construcción de obras públicas productivas, plantea el economista Luis Vargas.

Ese déficit también amerita, dijo Vargas, financiación de las empresas pequeñas y grandes, calificación de la fuerza de trabajo urbana y rural y revisión de los acuerdos internacionales de liberalización de los mercados.

Explica que en los últimos 17 años y siete meses, el saldo deficitario de las transacciones mercantiles de bienes de la economía dominicana con la americana ha sumado US$26,146 millones, debido a un valor importado de US$101,156 muy superior al exportado de US$75,009 millones.

Sostiene que el desequilibrio comercial en rojo de la nación dominicana con las demás naciones ha arribado a US$102,091 millones, fruto de las excesivas importaciones de US$225,338 sobre las exportaciones de US$123,247 millones.

Este sobregasto, dijo, constituye sin lugar a dudas una de las más relevantes del proceso rápido de re-endeudamiento foráneo del país.

Dijo que el desbalance correspondiente al DR-Cafta -9 años y medio – alcanzó US$25,121 millones, a raíz de exportaciones valuadas en US$39,272 por debajo de las importaciones calculadas en US$64,393 millones, lo significa que el 96% del total del déficit ocurrió en poco más de la mitad del tiempo.

Expresó que la escalada pronunciada del déficit se inicia en 2005 por motivo de aplicación de una política cambiaria de sobrevaluación del peso frente al dólar y, por tanto, abaratamiento de las mercancías importadas y encarecimiento de las locales.
Sostiene que de 1999 a los primeros siete meses del 2016, el valor exportado de la economía dominicana a la estadounidense en comparación a las exportaciones totales desciende a 51% de 84%, mientras el valor importado domínico-americano cae a 43% de 51% de las importaciones totales.

Dijo que el déficit comercial refleja las bajas tasas de productividad y competitividad de la economía criolla.