POR ANDREW BALLS
En Washington
El déficit comercial de Estados Unidos marcó un nuevo récord en octubre, que complicó las expectativas de Wall Street de que caería e indicando que el comercio será una carga superior a lo esperado en el crecimiento económico en el cuarto trimestre. El déficit comercial de EEUU en bienes y servicios subió a un récord de US$68,9 millardos en octubre, reportó el Departamento de comercio, movido por las importaciones de energía, carros y productos industriales. Las importaciones se incrementaron 2.7%, mientras que las exportaciones subieron 1.7%.
El déficit estuvo por encima del récord anterior de US$66 millardos en septiembre, lo cual desalentó las expectativas de que caería a US$63 millardos. Algunos economistas han estado esperando que el déficit se estabilice, debido al impacto demorado de la depreciación del dólar entre 2002 y los inicios de este año.
El aumento en el déficit se produjo a pesar de precios más bajos para las importaciones. Por otra parte, el Departamento de Comercio reportó ayer que los precios de las importaciones bajaron 1.7% en el mes, gracias a un descenso de 8% en los precios de la energía.
El deterioro en el cuadro comercial provocó que varios economistas redujeran sus pronósticos para la tasa de crecimiento en el cuarto trimestre del producto interno bruto de alrededor de 3.5% a 3%. El alza en las importaciones indica que la demanda en EEUU se mantiene fuerte, pero que más de esta demanda está siendo satisfecha por los productores extranjeros. El déficit de productos con China subió a US$20,1 millardo, de US$20,5 millardos.
El dólar continuó con una venta que había empezado después un fuerte sondeo Tankan sobre la confianza de los negocios en Japón. Los precios de los bonos del Tesoro de EEUU se incrementaron -con el rendimiento en el papel a 10 años en baja 8.8 puntos porcentuales, a 4.437% en comercio de la mañana ayer- ante las expectativas de que un crecimiento más débil y menor inflación importada pudiera significar que la Reserva Federal está a punto de terminar su campaña de ajuste en las tasas.