WASHINGTON. AP. La secretaria de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Janet Napolitano, defendió ayer la decisión del presidente Barack Obama de dejar de deportar a muchos inmigrantes traídos al país cuando eran niños y permitirles solicitar permisos de trabajo a pesar de que carecen de permiso de residencia.
Las leyes de inmigración de nuestra nación deben ser aplicadas de forma firme y sensible, afirmó la secretaria en declaraciones preparadas de antemano y enviadas a la Comisión Judicial de la Cámara de Representantes. Pero no están diseñadas para ser aplicadas a ciegas sin considerar las circunstancias individuales de cada caso. En sus afirmaciones, Napolitano describió el plan y defendió la decisión del gobierno. La secretaria estaba por comparecer ante el Congreso por primera vez desde que se anunció el plan.