El conuquismo y la deforestación se han incrementado en la Cordillera Central, principalmente en el parque José del Carmen Ramírez, en el que se observan amplias zonas devastadas por esas prácticas. La apreciación se hace más evidente por la vía aérea y sobre todo en comunidades como Los Fríos de Azua, Bohechío y Los Montoncitos, en San Juan de la Maguana.
El geógrafo Bolívar Troncoso, presidente del capítulo dominicano del Instituto Panamericano de Geografía e Historia, consideró como preocupante la erosión de playas del país cuando constituyen la principal imagen del turismo tropical.
Dijo además que existe dificultad para evaluar cuantitativamente lel problema en la costa ante la falta de datos de perfiles de playas o una base cartográfica adecuada, lo cual también es preocupante.
Troncoso advirtió que de todos los posibles impactos del cambio climático que afectan el turismo, ninguno es considerado más importante que la erosión de las playas arenosas, ya que son el principal recurso de la industria turística local.
Dijo que las pérdida de playa por esa causa se ha contactado especialmente en los balnearios Long Beach, Playa Dorada, Punta Goleta y Cabarete, en la provincia de Puerto Plata; Juan Dolio, en San Pedro de Macorís; y Playa Grande, en María Trinidad Sánchez.
Destacó que estos efectos erosivos aumentan además los daños que sufren los corales con el calentamiento de las aguas, tras señalar que en la zona de Bayahíbe están impactados en 30%, y en Bávaro menos del 10% se encuentran en condiciones favorables.
Detalló que también se encuentran en malas condiciones los corales de Las Terrenas, en Samaná, y las playas de Puerto Plata.
Troncoso expresó que a esto se suma que el desarrollo de la actividad turística se ha hecho de manera precipitada y desordenada, sin un marco regulatorio adecuado y sin que se cumplan las normas establecidas en materia ambiental y de ordenamiento territorial.
Troncoso, quien además dirige la escuela de Turismo de la Universidad O & M, recordó que los pronósticos sobre los efectos del cambio climático en el país apuntan más severamente a las zonas costeras, donde justamente está el mayor flujo de inversión turística.
Por tanto, sugirió, que se inserte en los estudios de impacto ambiental para nuevos proyectos, modelos de adaptación al de los cambios del clima.
Recordó que el sector turístico es el mayor generador de empleos del país con 195,519 plazas y divisas por US$4,176 millones al 2008. Troncoso habló de este tema al exponer en el Diálogo interministerial sobre el cambio climático que se celebra en el país con la participación de técnicos de varias instituciones estatales, Ongs, agencias de cooperación y academias.
Las claves
1. Corales afectados
El calentamiento de las aguas por aumento de las temperaturas en el mar afecta a los corales, pero también la erosión de playas.
2. Actividad desordenada
Pero, además el elemento antropógenico, es decir el factor humano, incide en estos daños ambientales, pues muchas infraestructuras turísticas se levantan irrespetando los recursos naturales costeros.