El gobierno haitiano mantiene el cierre de su frontera con la República Dominicana en esta zona, pese a la reapertura que han hecho las autoridades nacionales para restablecer el comercio binacional por esta provincia. Sin embargo, aún con las restricciones, Haití está permitiendo a sus ciudadanos la entrada de alimentos y otras mercancías por esta línea fronteriza.

Pero según los informes, los productos que los extranjeros logran pasar a su territorio tienen un precio. Los haitianos deben pagar impuestos que varían según el volumen de las mercancías que llegan a su país.

La medida del pago de los tributos se impuso desde el pasado martes, se informó a este reportero.

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Para que se cumpla con el pago correspondiente el inspector de Aduanas en Juana Méndez, Haití, Michael Gerald, expresó que se encuentra en el puente fronterizo para que los haitianos que tengan su cargamento sean enviados a la institución para que paguen los tributos antes de ingresar a su territorito.

Para evitar pagar por el trasiego de la mercancía, algunos comerciantes haitianos lanzan sus fletes al río Masacre cuando llegan al puente del paso fronterizo. Debido a la acción de la violación a las normas, las autoridades haitianas incautan las mercancías a los infractores de la ley.

El cruce de las mercancías hacia Haití por el puente ocurre por una puerta pequeña que mantienen las autoridades abiertas para permitir el acceso de haitianos que se encuentran en la provincia de Dajabón y que quieran retornar a su país, flexibilidad que aprovechan para entrar con alimentos para comercializar y llevarlos a sus hogares.

Debido al tráfico ilegal de mercancías hacia Haití el comerciante dominicano Juan Santiago Gómez, expresó que los productos de primera necesidad los están pasando de contrabando al vecino país, por lo que llamó al Gobierno dominicano a enfrentar la situación.