El ministro de Industria y Comercio, José del Castillo, advirtió ayer que la baja en los precios de los combustibles deberá tener un impacto en los precios de la canasta básica, como en los demás bienes y servicios que dependen del costo de los carburantes.

Ante la negativa de los comerciantes a realizar las reducciones de lugar, dijo que para que la rebaja impacte los precios se debe mantener por un tiempo y eso ya ha ocurrido. “Desde julio del año pasado hemos experimentado alrededor de 20 semanas de rebajas y congelamientos”, recordó.

Asimismo, observó que ya el gobernador del Banco Central ha previsto que el ahorro que tendrá la economía por la disminución de los precios, sobre todo si se mantiene el escenario, es de alrededor de 600 millones de dólares. “Eso deberá, de alguna manera, permearse en toda la economía, en todos los costos de los bienes y servicios de la economía incluyendo los productos que se transportan, que son producidos también a través del uso de energía eléctrica”, insistió Del Castillo.

Pasajes. En relación con los precios del pasaje, dijo que espera que las reuniones dejen un buen fruto. Señaló que hay razones para revisar la tarifa. “En el caso del gasoil ha disminuido alrededor de 30 pesos, además los transportistas reciben un subsidio de cuatro millones de galones mensuales que, aunque ellos plantean que se lo eliminen, lo retiran todas las semanas, o sea que si dejan de retirarlo ya no hay que eliminarlo”, indicó.