La harina de maíz, producto cuya utilidad en el arte culinario se remonta a época muy lejana, incluso en la alimentación de nuestros primeros pobladores, los taínos, no está en la lista de los ingredientes gourmet.

Se podría decir que este producto, que se extrae de la mazorca de maíz, es incluso excluido, minimizado, en la culinaria, sin embargo, además de la diversidad de platos dulces y salados que podemos preparar, es rico en propiedades nutricionales.

La harina que se elabora mediante el grano del fruto del maíz está en la categoría de los cereales. Es un alimento muy accesible y disponible en cualquier época en el mercado y con él podemos sorprender elaborando deliciosas recetas.

¿Se ha detenido a saborear el delicioso pastelón de maíz, unas crujientes arepitas, unos buñuelos…?

¡Ah, y no olvide la tradicional y conocida arepa, que puede hacer dulce o salada!

Propiedades nutritivas. Este alimento contiene proteína, hierro, zinc, magnesio, carbohidratos, yodo, vitaminas B1, B2, B3, B5, B6, B7, B9 B12, C, D, K y fósforo.

No la excluya de su dieta, ¡aproveche sus beneficios!