Fruta. Además de ser un rico antioxidante contiene múltiples minerales y el tan esencial potasio

En la gastronomía, la fresa es más utilizada en la elaboración de recetas dulces, pero su exquisitez aumenta en platos salados, ya que marina muy bien con quesos, mariscos…

La deliciosa fresa, a la que además se le atribuyen efectos afrodisíacos, especialmente en compañía de una champaña o vino, está entre las frutas más exquisitas.

Sin embargo, sus características van mucho más allá; contiene más vitamina C que cualquiera de sus pares; vitamina B2, B3, ácido fólico y fibras.

Hay más de una razón para consumirla. Aquí le mostramos dos fáciles, rápidas y ricas recetas saladas con fresas.

Recetas
Atún marinado con fresas y pistacho verde

140 gramos de atún
2 fresas grandes
10 a 12 pistachos verdes
Azúcar morena
Sal al gusto
10 gramos de salsa de soya
10 gramos de aceite de sésamo
¼ cuharada de jengibre molido
¼ cucharada de pimienta negra recién molida

Preparación. Limpiar los lomos de atún y ponerlo en una cazuela y mezclar en una fuente la salsa de soya, el aceite de sésamo, el jengibre y la pimienta negra y verter la mezcla encima del atún y taparlo con papel film transparente. Posteriormente, llevar al refrigerador para que se marine e impregnen bien los sabores dándoles vuelta de ves en cuando durante una media hora. Cuando el atún esté marinado, cortarlo en porciones del tamaño de un bocado en la forma que se prefiera, cuadrada, rectangular. Lavar las fresas, retirar las semillas y cortarlas en rodajas finas, espolvorear por encima un poco del azúcar morena. Colocar los pedazos de atún marinado como base, colocar sobre este dos rodajas de fresa y dos pistachos verdes pelados y aderezar con una cucharadita de la mezcla previamente hecha y un poco de sal, y listo.

Tartar de gambas y fresas

80 gramos de vinagre de arroz
150 gramos de agua
20 gramos de aceite de sésamo
1 cucharadita de sal
8-10 cucharadita de azúcar
140 gramos de cebolla morada
240 gramos de fresas
10 gramos de cilantro fresco picado
5 gramos de hierbabuena fresca picada
Pimienta negra al gusto
600 gramos de gambas frescas peladas
Para aderezar
1 c/n de aceite de aceite de oliva
2 fresas
4 tallos de hierbabuena

Preparación. En una cazuela amplia verter el vinagre, el agua, el aceite de sésamo, la sal y el azúcar y mezcla bien. Pelar y picar la cebolla en brunoise y echarla a la cazuela. Lavar las fresas, retirar las semillas y cortarlas en daditos y añadirlas también. Lavar, secar y picar finamente las hierbas aromáticas e incorporarlas. Añadir la pimienta al gusto. Mezclar bien y dejar reposar una media hora. Por otro lado, pelar las gambas, limpiar bien y picarlas. Secarlas bien con papel absorbente e incorporarlas a la cazuela. Mezcla de nuevo para que se integren los ingredientes y listo, servir en un platón y aderezar con un poco de aceite de oliva y decorar con un par de rodajas de fresa y una ramita de hierbabuena.