Los asaltos y atracos mantienen en zozobra a los residentes de los sectores Palma de Alma Rosa II, Mi Hogar y El Brisal, en Santo Domingo Este, donde los actos delincuenciales se producen a cualquier hora del día o de la noche.
Las acciones delincuenciales no afectan solamente a los ciudadanos que salen de sus hogares sino además a los establecimientos comerciales, como colmados, bancas y otros.
Raúl Fortunato, quien reside en la calle Corazón de Jesús, en la Palma de Alma Rosa II, expresó que en esa zona la delincuencia prácticamente se ha apoderado del sector, lo que atribuyó a la poca vigilancia policial, pero también a la crisis que afecta al núcleo central de la sociedad, la familia.
Citó que hace tres días una vecina suya fue asaltada, como a las 8:00 de la mañana cuando se disponía a salir de su hogar y además mencionó algunos establecimientos comerciales que también han sido víctimas de los malhechores.
Recordó a un joven de apenas 20 años que fue víctima de delincuentes que originaron una balacera en la calle José Jiménez, de ese sector, por lo que lamentó que no estén seguros en ninguna parte.
En la calle 18 del mismo sector fue asaltada Isabel Durán, de la banca Marrero, a quien despojaron de dinero, celular y prendas, en medio de un apagón, entre las 8:30 y 9:00 de la noche.
Aquí atracan a cualquier hora del día, respondió Nerys de León, propietario del colmado Jeremy, en la calle Primera esquina 5, quien está vivo para contarlo, ya ha sido víctima de atracos en dos ocasiones.
La primera vez, dijo, los ladrones penetraron en horas de la madrugada al negocio de donde cargaron con mercancías por valor aproximado de cien mil pesos, pero hace poco se salvó por un milagro, ya que un disparo pasó por encima del mostrador e impactó en uno de los congeladores.
Lamentó que a pesar que los casquillos de la bala y otras evidencias fueron entregadas a la Policía Nacional, la institución no hizo nada por atrapar a los asaltantes, pero que en cambio los agentes se colocan en las calles del sector para detener vehículos y motoristas pero solamente para cobrar los peajes.
De su lado Francisco Solano Marte, quien reside en la calle 6, explicó que su esposa y una hija han sido víctimas de los asaltantes en los meses recientes y que la situación es tan difícil que los domingos tiene que buscar a su compañera Ramona Fernández a la iglesia para protegerla de los malhechores.
Dijo que el pasado jueves su hija Melkis Marte fue interceptada por dos delincuentes en una motocicleta cuando salía para su trabajo, pero que se salvó por la intervención de un carro que se hizo pasar como el del concho.
El grito también se oye en Mi Hogar, específicamente en las calles 6 y Tercera, ya que los asaltos y atracos no tienen horas para ocurrir, a pesar de que en ocasiones hay patrullas de la Policía Nacional.
Francis Cruz, quien vive en la zona, precisó que los atracos se producen cuando las personas salen a su trabajo y cuando regresan en la noche, sobre todo los días de pago, tales como los 15, 30 y los 25.
Señaló que casi siempre los asaltantes andan en motocicletas, aunque en ocasiones también en carros o en ambos vehículos.
Las claves
1. Asaltos y robos
En Palma de Alma Rosa II, Mi Hogar y el Brisal, en Santo Domingo Este, los actos delincuenciales se producen a cualquier hora del día o de la noche. Los ciudadanos de esa zona de clase media pegan el grito al cielo por el asedio de los malhechores que circulan en motores y carros.
2. Reincidencia
En los sectores señalados hay establecimientos comerciales que han sido asaltados hasta dos y tres veces en menos de tres meses. Tal el caso del Colmado Jeremy, en la calle Primera.