En busca de nuevos espacios donde cometer sus fechorías, los delincuentes han tomado por asalto las universidades, aprovechando la falta de control en las entradas de esos recintos.
Estudiantes universitarios encuestados por reporteros de Hoy dijeron que fueron despojados de dinero y de celulares, en hechos ocurridos dentro de las aulas y en áreas abiertas en sus centros de estudio, por desaprensivos que astutamente se hacen pasar como alumnos para cometer sus delitos.
Por ser una de las universidades con mayor afluencia de estudiantes, la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) es una de las más expuestas a delincuentes encubiertos y hasta a enfermos sexuales. Se han reportado intentos de violación.
Bryan Mesa, estudiante de Publicidad en la universidad estatal, contó que en una ocasión un grupo de estudiantes impidió que abusadores violaran a una alumna de Odontología, a quien no identificó, mientras utilizaba uno de los baños de su facultad.
Recordó que cuando la estudiante entró al baño, alrededor de las siete de la noche, se encontró con dos jóvenes que esperaban dentro para violarla, pero afortunadamente, algunos compañeros acudieron en su auxilio.
De su lado Mariel Montero, quien cursa la carrera de Derecho, narró que hace un alrededor de un mes una compañera fue amenazada con un arma blanca dentro del campus universitario y se vio obligada a desprenderse de su celular.
Dijo que en una ocasión notó que la espiaban mientras usaba uno de los baños del centro universitario.
En tanto, un grupo de estudiantes de la Universidad Católica Santo Domingo capturó la semana pasada a un joven a quien acusaron de robar celulares a varias personas dentro del recinto.
El padre Ramón Alonso Beato, rector de la universidad, informó ayer que el ladronzuelo todavía no ha sido procesado por estos robos y que dará seguimiento al caso.
En la Universidad Acción Pro Educación y Cultura (Apec) la historia se repite, ya que, según cuenta Carla Cruz, quien cursa el tercer año de Mercadeo, le fueron sustraídos 500 pesos de su cartera, en un momento de distracción mientras recibía docencia.
Aseguró que en la biblioteca un delincuente que parecía estudiante le robó un celular a una compañera.
Las claves
1. Falta de control
Estudiantes atribuyeron el acceso de delincuentes a los centros de estudio a la falta de control en las entradas de las universidades.
2. Nada que hacer
Las autoridades universitarias admitieron que prácticamente no pueden hacer nada para impedir que desaprensivos entren a estos centros, ya que es imposible chequear el carné a cada estudiante.