POR JOSE ALFREDO ESPINAL
SANTIAGO.- Por lo menos cuatro reporteros gráficos han sido maltratados en la última semana por la seguridad del hospital José María Cabral y Báez, denunció ayer la Asociación de Periodistas y Reporteros Gráficos que cubre la fuente de salud, quien afirmó que sus miembros son objetos de censura previa.
Agrupados frente a la emergencia del hospital más importante de la ciudad y de la región del Cibao, protestaron por los atropellos que reciben de los agentes policiales, militares y seguridad privada del centro hospitalario.
También, calificaron como absurdas e intolerantes la posición del director del centro, Andrés Rivas, y de su relacionador público, el periodista José Checo, a quien sus colegas llamaron traidor a su clase.
Ayer, mientras exigían hablar con el doctor Andrés Rivas para solicitarle que desistiera de la medida, su asistente, el oficial del Ejercito Nacional de apellido Valdez, golpeó en el rostro al camarógrafo Erasmo Ventura, del programa Sin Nombre.
Pero antes de este incidente el reportero Ramón Galán, de Premium Informativo, había sido vejado y maltratado física y verbalmente por la seguridad del hospital.
El periodista Osvaldo Nelson y el reportero gráfico José Disla, representantes de la Asociación que cubre la fuente, explicaron que desde el pasado lunes lo han amordazado para que los medios no informen sobre los problemas del centro de salud.
El director del hospital alega que prohibió la entrada nuestra hay algunos camarógrafos que han penetrado a áreas restringida porque solo publicamos las cosas malas del centro, informó Nelson, presidente de la entidad que agrupa los comunicadores.
Sin embargo, dijo que pese a esas declaraciones del funcionario no permitirán que se coarte la libertad de informar a la población de lo que acontece en el Cabral y Báez, lo que manifestó es un desastre por la falta de medicamentos y atenciones a los pacientes que las autoridades quieren mantenerlo en secreto.
Nos quejamos porque ellos quieren callarnos a la fuerza y no lo vamos a permitir porque estamos amparados en la ley, señalaron los dirigentes gremiales.
Por su parte, el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP) deploró la situación que ocurre en el hospital Cabral y Báez.