Denuncian a Cristina Fernández por romper veda

Denuncian a Cristina Fernández por romper veda

 Buenos Aires — A continuación, los sucesos más importantes de la inédita segunda vuelta electoral entre el opositor conservador Mauricio Macri y el peronista Daniel Scioli para ganar la presidencia de Argentina. Todas son horas locales.

A poco más de una hora del cierre de las urnas ya votó 66% del padrón electoral según la Cámara Nacional Electoral. Esto supone más de 21 millones de argentinos de los 32.064.323 mayores de 16 años habilitados para hacerlo.

Las elecciones se desarrollan con normalidad en una jornada histórica en la que los argentinos deciden por primera vez en una segunda vuelta o balotaje quién será el sucesor de Cristina Fernández.

El fiscal electoral Jorge Di Lello recibió denuncias que acusan a la presidenta Cristina Fernández de haber violado la legislación de veda electoral por las declaraciones que hizo a la prensa tras emitir su voto. Al parecer particulares acusaron a la presidenta de no respetar el veto y buscar el voto por Daniel Scioli, minutos después de que la mandataria terminara su charla con los periodistas.

En sus declaraciones a la prensa, Fernández repasó algunos de los logros de 12 años del kirchnerismo y analizó su gestión y la de su difunto marido, Néstor Kirchner. Di Lello confirmó esta información al medio Radio América.

Algunas de las denuncias habrían involucrado también al candidato oficialista Daniel Scioli, quien sus declaraciones a los medios tras votar se dirigió a los indecisos. Además se habrían recibido un total de 30 denuncias durante el día por cuestiones como falta de boletas, autoridades o cuartos oscuros inadecuados.

La mayoría de las figuras políticas nacionales cumplieron con su deber electoral temprano. El último fue el hijo de la mandataria, Máximo Kirchner, quien acudió a votar junto con su hermana Florencia en una escuela de Río Gallego, en la provincia patagónica de Santa Cruz, donde la presidenta pasa largas temporadas.

Máximo afirmó tener una buena relación con el candidato oficialista Daniel Scioli y aprovechó para elogiar la gestión kirchnerista y afirmar que el próximo presidente tiene “la responsabilidad de profundizar y continuar, con más argentinos dentro” dichos logros.

Antes, también acudió a votar el ministro de Economía Axel Kicillof, quien alabó la buena situación económica. “Son cifras objetivas. Hemos llegado con crecimiento de la economía, de la venta, de turismo, con una situación financiera del país de desendeudamiento”, afirmó, señalando que es necesario “votar con la cabeza en frío”.

Ya votó el 32% del padrón nacional, informó el secretario de la Cámara Nacional Electoral de Argentina. Esto supone más de 10 millones de argentinos de los más de 32 millones mayores de 16 años habilitados para hacerlo.

Las elecciones se desarrollan con total normalidad, en una jornada histórica en la que los argentinos deciden por primera vez en una segunda vuelta quién será el sucesor de Cristina Fernández: el oficialista Daniel Scioli o el opositor Mauricio Macri.

El excandidato presidencial Sergio Massa, que obtuvo 21% de los votos en la primera vuelta electoral de octubre, emitió su sufragio en la escuela Martín Fierro, en Tigre, Buenos Aires, en medio de una gran expectación mediática. “Siempre una elección implica el inicio de una nueva etapa”, declaró.

El peso de los votantes de Massa se considera clave para inclinar la balanza hacia el opositor Mauricio Macri o el oficialista Daniel Scioli y su figura adquirió gran importancia en el último mes de campaña. Massa ha rechazado pronunciarse en varias ocasiones por uno u otro candidato, al igual que este domingo.

“No voy a violar la veda. Soy un dirigente político con la responsabilidad que implica haber tenido cinco millones y medio de votos”, afirmó. Señaló que su formación política, Unidos por una Nueva Alternativa (UNA), anunciará a las 19:30, tras el cierre de urnas, su postura hacia el nuevo gobierno.

En el colegio de Nuestra Señora de Fátima de la ciudad de Río Gallego, en la provincia patagónica de Santa Cruz, se presentó a votar la presidenta argentina Cristina Fernández. Tranquila y sonriente, charló con una señora mayor que estaba votando en ese momento con la que bromeó sobre a quién votaba, para tras saludar a los vocales de mesa y emitir su voto.

Después, la presidenta se tomó una foto con el personal de la mesa electoral e hizo una larga declaración a la prensa en la que resumió muchos de sus logros y revisó los avances logrados en los 12 años de kirchnerismo.

“Es un día muy importante. Nunca habíamos asistido a un acto eleccionario con un país en estas condiciones”, señaló la mandataria, destacando las cifras de desempleo y la “paz social” en el país. “Nunca hemos tenido un período de gobierno con esta estabilidad económica y social”, afirmó.

La mandataria también expresó su preocupación por la vandalización del que fuera el centro de detención Mansión Seré en Castelar, en la provincia de Buenos Aires, donde aparecieron grafitis con la inscripción “El 22 se termina el curro”. Kirchner destacó además la importancia de la defensa de los derechos humanos en el país.

Pasadas las 11 de la mañana ya habían votado un 21% de los argentinos, según datos de la Cámara Nacional Electoral. Los argentinos eligen el domingo a quien gobernará el país los próximos cuatro años en una inédita segunda vuelta electoral entre el opositor conservador Mauricio Macri y el peronista Daniel Scioli, partidario de mantener el modelo populista del kirchnerismo.

Diez minutos después de la hora prevista y ante una gran expectación, llegó a votar el candidato opositor argentino Mauricio Macri acompañado por su esposa Juliana Awada.

Macri acudió a votar en la escuela Wenceslao Pose del barrio de Palermo, la cual estaba plagada de periodistas y seguidores. Sonriente y tranquilo, el candidato emitió su voto y saludó a los vocales de mesa, a los que les trajo pastelitos (facturas), como es su costumbre.

Se tomó fotos con seguidores e incluso recogió y devolvió un micrófono que se le cayó a un periodista, ante la aglomeración de medios tratando de captar su declaraciones. “Siento una alegría enorme. Es un día histórico en que va a cambiar nuestros destinos. Comienza una nueva etapa en Argentina”, declaró el candidato al que favorecen las encuestas, quien dijo que iba a dedicar el resto del día a jugar fútbol.

Carlos Zannini, compañero de fórmula del candidato presidencial Daniel Scioli, aseguró que hoy “es un día de fiesta” y que confía en que el pueblo argentino “defenderá las conquistas” del kirchnerismo. “Creo que la gente va a querer seguir avanzando y profundizando el cambio”, señaló sonriente.

Además, contó que anoche cenó con la presidenta Cristina Kirchner y que pudo darse el lujo de cocinar unas “chuletitas de cordero”. Al votar en un colegio de Río Gallegos, Zannini bromeó con la prensa. Una periodista le comentó que vestía lo mismo que en las elecciones anteriores, a lo que respondió con humor: “La camisa es distinta. No es cábala, sino que así es como me gusta estar acá”.

Casi al mismo tiempo que el candidato oficialista del Frente para la Victoria, Daniel Scioli, votó la gobernadora electa de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, de la coalición política opositora Cambiemos. Vidal afirmó que “Mauricio Macri está tranquilo” y que “esta es la posibilidad de elegir algo distinto, desde la esperanza, la necesidad de cambio.

Poco antes de las 9:30, un sonriente Daniel Scioli depositó su voto con dificultad ante el asedio de numerosos periodistas a los que declaró: “Espero con las mejores expectativas la decisión del pueblo argentino”.

El candidato oficialista del Frente para la Victoria acudió a las urnas en la mesa 805 de la escuela número 16 del Dique Luján acompañado de su esposa Karina Rabolini y de su hija Lorena. “Hoy va a ganar el pueblo, gana la gente. Le tengo mucha fe y confianza”, manifestó.

El político más madrugador fue el actual jefe del gabinete, Aníbal Fernández, quien se presentó a votar en la Escuela Comercial número 9, en la mesa 115 de Quilmes Este.

El funcionario Llegó a votar poco después de la apertura de las 94.979 mesas receptoras de voto en la que pueden depositar su elección los más de 32 millones de argentinos mayores de 16 años habilitados para participar en esta segunda vuelta crucial.