San Juan, (EFE).- El presidente de la Junta de Amnistía Internacional Sección de Puerto Rico, Osvaldo Burgos, denunció hoy una crisis de derechos humanos en la isla caribeña y atropellos contra la comunidad dominicana.

Burgos aprovechó la presentación en San Juan del Informe 2011 de los Derechos Humanos en el Mundo para señalar que esa crisis que denunció es posible debido a la falta en Puerto Rico de un plan de promoción y protección de los derechos humanos.

 El abogado dijo que en Puerto Rico se produjeron durante el pasado año ataques contra la libertad de expresión, la libertad de prensa y de asociación.

Aseguró, en referencia al Ejecutivo de Luis Fortuño, que se está produciendo en el país un «desmantelamiento de las instituciones que se pueden enfrentar al Gobierno» y dio como ejemplo los ataques que en su opinión se han producido contra el Colegio de Abogados y el Tribunal Supremo.

Burgos indicó también que en estos momentos hay una «línea difusa de separación entre Gobierno e Iglesia», tras asegurar que muchas de las decisiones del Ejecutivo son dogmáticas. Dijo que varias de las leyes impulsadas por la presente Administración están basadas «en mensajes divinos» que reciben los miembros de las cámaras legislativas.

 En cuanto a la comunidad dominicana en Puerto Rico -la más abundante del país-, denunció que sufre «alta xenofobia», malas condiciones laborales y discriminación por parte de funcionarios públicos si perciben que la persona proviene de ese país. Burgos hizo extensiva la discriminación de los dominicanos a la comunidad lésbica, gay, bisexual y transgénero (LGBT) boricua.

El director ejecutivo de Amnistía Internacional Sección de Puerto Rico, Pedro Santiago, subrayó por su lado que durante el último año el Ejecutivo de Luis Fortuño violó los derechos de los estudiantes, en referencia a la huelga de varios meses en la Universidad de Puerto Rico. Santiago resaltó además que Puerto Rico es de los pocos países del mundo al que se le impone de forma forzada la pena de muerte, debido a la dependencia colonial que mantiene con Estados Unidos.

 El capítulo dedicado a Puerto Rico del Informe 2011 de los Derechos Humanos en el Mundo señala que en mayo de 2010, durante la huelga de estudiantes, se tuvo noticia del uso excesivo de la fuerza por parte de la Policía. El informe se refiere además al núcleo de viviendas ilegales de la Comunidad de Villas del Sol, en Toa Baja, con un elevado número de vecinos dominicanos.

Amnistía Internacional recuerda que se dirigió a las autoridades locales para que permitieran prolongar el plazo de desalojo y favorecer así que sus pobladores encontraran una alternativa digna. EFE