POR MANUEL JIMÉNEZ
NAGUA, María Trinidad Sánchez. Representantes de diversos sectores locales denunciaron ayer al presidente Leonel Fernández un creciente estado de inseguridad en esta provincia, especialmente en su municipio cabecera, a causa del auge de la delincuencia, el tráfico de drogas y los robos al comercio.
El presidente Fernández escuchó las quejas, acompañado de cerca de una veintena de funcionarios, en el curso de la audiencia popular que encabezó en el multiuso de esta ciudad, donde también le solicitaron la construcción de numerosas obras públicas.
Isaac Victoria Tejada, quien habló en representación de los ganaderos de Nagua, Cabrera y Río San Juan, denunció la existencia de bandas que se dedican a descuartizar y a robar reses en fincas lecheras de la zona.
Tejada dijo que estas acciones de delincuencia común se producen con frecuencia e incluso, entregó al Presidente Fernández fotos de reses descuartizadas y abandonadas. Dijo que los hechos se producen con relativa impunidad porque los policías de servicio carecen de vehículos para patrullar las áreas ganaderas y que, en muchas ocasiones, son los propios ganaderos que tienen que facilitar los recursos para la compra de combustibles.
Tejada pidió al presiente Fernández la construcción de puestos de control a las salidas de la ciudad y que se prohiba el sacrificio de animales en «patios», sin ningún control sanitario ni vigilancia de las autoridades correspondientes.
De su lado, Félix Salazar, quien habló en representación del sector comercio, dijo que la mayoría de los establecimientos en esta ciudad se ven obligados a cerrar sus puertas a las 7:00 de la noche, por temor a los asaltos y al robo. También se quejó ante el gobernante, por el auge de la delincuencia, el tráfico y el consumo de drogas en la ciudad.
Mostró también su preocupación porque, conforme añadió, los apagones conspiran contra la rentabilidad del comercio, «porque nadie aguanta tener una planta prendida por 10 y 12 horas diarias».
Reconoció que no tan sólo el gobierno, sino todos los sectores del país, «tienen que poner su granito de arena para combatir la delincuencia».
Casi todos los representantes de sectores que hicieron uso de la palabra en el curso de la audiencia popular reclamaron del gobierno la construcción del acueducto, la terminación de los multiusos dejados a mitad de construir por la gestión anterior, así como de las edificaciones del Centro Regional Universitario de Nagua. Estas tres peticiones básicas, así como la terminación de escuelas, liceos secundarios, la reconstrucción de carreteras y caminos vecinales, así como de calles, fueron satisfechas por el presidente Fernández.
Al final de la audiencia, el gobernante conversó con el sacerdote Rogelio Cruz, a quien garantizó que las obras prometidas serían ejecutadas.
La audiencia popular se inició después que el Presidente Fernández tomó el juramento a los integrantes del consejo provincial de desarrollo que encabeza el gobernador José Luis Cosme.
El ciudadano español Juan José Rodríguez, gerente del hotel Bahía Príncipe, de Río San Juan, pidió al presidente Fernández una buena asesoría para implementar un programa de desarrollo turístico de la zona y el rescate de la laguna Gri Gri, en la misma zona.
El representante de los ganaderos, Isaac Tejada le pidió también al gobernante, que el Banco Agrícola reduzca la tasa de interés que carga a sus préstamos, de 18 a un 12 por ciento, que se facilite tractores a las asociaciones ganaderas de la zona y se construyan los sistemas de abastecimiento de agua y de electricidad.
Los molineros de arroz, que fueron representados por el señor Víctor Veras, solicitaron actualizar los pagos por la pignoración del cereal.
En la audiencia intervinieron representantes de las iglesias, así como de los productores agrícolas, quienes también pidieron al presidente Fernández, recursos para la rehabilitación de las plantaciones de coco, cacao y otros cultivos afectados por el huracán Jeanne.