DAJABÓN. La Coalición por un Mercado Digno (Comerdi) en esta ciudad denunció ayer que el mercado fronterizo continúa en el “limbo”, mientras  los comerciantes y la población de la frontera están sumergidos en la contaminación, la corrupción y el desorden, situación que empeora cada día, dificultando las actividades comerciales.

El padre Regino Martínez, representante de Solidaridad Fronteriza y de Comerdi, dijo que en la zona donde se realiza actualmente el mercado  no ha habido una explosión de cólera “por la misericordia de Dios”.

El sacerdote responsabilizó al Ministerio de  Salud Pública y a la Dirección General de Normas y Sistemas de Calidad (Digenor) de la falta de higienización en el lugar donde se realiza el mercado.

“Reiteramos que el lugar donde funciona el mercado no es el más adecuado. Da vergüenza, pena y conmoción ver que con las últimas aguas, la cañada que pasa por  medio del mercado, inunda el lugar y les llega hasta la cintura a las personas. Es inmisericorde realizar un mercado en esas condiciones”, manifestó Martínez.

Los vendedores están ubicados en un solar contiguo a la construcción de las instalaciones que albergarán el nuevo mercado fronterizo, pero la fecha de terminación de la obra no ha sido determinada, y los comerciantes han tenido que desarrollar sus actividades económicas en pésimas condiciones.

“El lugar donde se realiza el mercado se ha empeorado, sobre todo con las lluvias de los últimos días, lo que ha provocado pérdidas a los comerciantes.

Las autoridades son indolentes. Salud Pública mandó a realizar el mercado ahí, pudiendo haberse acondicionado otra área, pero aquí la irracionalidad y el clientelismo es lo que decide”, expresó Martínez.

Al considerar que no se toma en cuenta la importancia del mercado fronterizo de esta ciudad, Martínez culpó al ayuntamiento de esta localidad, a la Unión Europea y demás responsables de la construcción de las nuevas instalaciones, de no tener seriedad ni compromiso con  la ejecución de la obra.

Afirma que el nuevo mercado, cuya construcción avanza muy lentamente, no será la panacea al problema, porque las instalaciones sólo tienen capacidad para 400 cubículos, mientras, según registros de Comerdi, son más de tres mil los mercaderes que tienen puestos instalados.

“Se habla mucho de venta de cubículos y de mediaciones irregulares para asegurar los puestos en el nuevo mercado, pero el gran problema es que hay menos lugares que comerciantes”, dijo.

 La Red Fronteriza Jano Siksè (RFJS) y Solidaridad Fronteriza (SF) denunciaron la violación a los derechos humanos por parte de algunos funcionarios y militares en los primeros siete meses de este año.

Las claves

1.  En el limbo

Debido a la lentitud con que  marchan los trabajos de construcción de las  instalaciones del mercado fronterizo, este proyecto parece estar en el limbo, mientas las actividades comerciales se desenvuelven en medio de la  contaminación, la corrupción y el desorden.

2.  Amenaza de cólera

 Martínez, representante de  Solidaridad Fronteriza, dijo que en el lugar no ha habido una explosión de  cólera  por la misericordia de Dios.

3.  Los vendedores

Los vendedores están  en un solar contiguo a la construcción, pero no saben  cuando  terminarán la obra.