PUERTO PRÍNCIPE (EFE).- La Comisión Nacional de Derechos Haitianos (CNDH) declaró ayer su insatisfacción por la situación del país, tres meses después de un cambio de gobierno.

La organización y varios abogados sostuvieron en los medios de comunicación que no han notado esfuerzos especiales del gobierno para atender los reclamos de justicia que hacen los ciudadanos.

«No hay violaciones de derechos humanos por parte del gobierno, la violencia no es usada como principal arma política como lo hizo Lavalás (partido del ex presidente Jean-Bertrand Aristide), (pero) el gobierno no hizo ningún esfuerzo para terminar con la impunidad y la corrupción», dijo Pierre Espérance de la CNDH a Radio Visión.

Espérance denunció que los líderes de los grupos que colaboraron con el antiguo régimen están libres cuando «debieran estar en la cárcel».

Mencionó a Franco Camille, quien está libre pese a que se le adjudican varios crímenes y a «los recientes incendios que destruyeron un mercado en Gonaives (150 kilómetros al norte de la capital) y el fuego que devastó el miércoles una parte del centro comercial de Puerto Príncipe».

Mientras, Samuel Madistin, ex senador y abogado, calificó de «negativas» las acciones del gobierno al impartir justicia.

Denunció que no hay esfuerzo para enfrentar el problema de la impunidad y la corrupción.

Madistin lamentó que no haya «acciones que muestren una voluntad de ruptura ni siquiera de poner las bases de construcción de un nuevo aparato judicial».

El abogado señaló que hay deficiencias en los sistemas de justicia en ciudades importantes como Cabo Haitiano (norte), Gonaives y Saint-Marc (ambas al oeste del país).

«Nada nos indica que el gobierno comprenda la necesidad de justicia que satisfaga las reivindicaciones de la población», opinó.

Por su parte, Carlos Hercule, dirigente del Centro Toussaint Louverture, describió como «moderada» la acción del gobierno en el campo judicial.

Hercule señaló que ha habido arrestos de algunas figuras del anterior régimen, pero deploró que «no haya disposiciones para reformar el sistema judicial».

El dirigente del Centro Toussaint Louverture aseguró que en algunas situaciones el gobierno «anima la impunidad».

Ante el recrudecimiento de actos de inseguridad en el país y las declaraciones de simpatizantes del partido Familia Lavalás en varias emisoras, algunos sectores sociales han responsabilizado al gobierno de no haber arrestado a esas personas.

El ex primer ministro Yvon Neptune criticó en pasados días al gobierno en declaraciones a Radio Solidarité y Mélodie FM, y convocó a los simpatizantes de Lavalás y al ex presidente Aristide a que actúen para derrocar a las autoridades actuales del país.

En varios medios se ha sugerido que los recientes incendios son consecuencia de las declaraciones de Neptune, y diversas organizaciones han pedido públicamente el arresto del ex primer ministro y los demás dirigentes de Familia Lavalás.