El presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, Manuel María Mercedes, pidió ayer al Gobierno declarar en estado de emergencia la penitenciaria Nacional de la Victoria, por el peligro que representa para los internos y la comunidad, por las enfermedades que se generan.
Hizo la solicitud ante la cantidad de internos con enfermedades terminales y los afectados por el cólera, que en el último mes ha provocado la muerte de unos cinco internos y otros 15 están afectados.
Explicó que ese recinto está rodeado por una cañada en la que se tiran gran cantidad de basura y heces fescales, convirtiéndose en foco de contaminación para los reos y unas 75 mil comunitarios.
Entre los problemas que afectan ese recinto están: la sobrepoblación, ya que fue construida para albergar a 2,000 presos, pero hay 5,000; infraestructura inadecuada, la cocina en mal estado, escaso suministro de alimento, lo que genera anemia y escasa resistencia a enfermedades.
También la falta de instalaciones sanitarias, poca custodia, ya que se necesitan 200 y ahora solo tienen 100; escasez de vehículos para el transporte, pues tiene uno y en mal estado, representando un peligro para internos y los custodias, limitando el traslado a los tribunales.
Otro factor que dice perjudica y convierte en un infierno en la tierra la convivencia es el hecho de que el centro fue construido sobre un río subterráneo y cuando llueve el agua sube y con ella basura y un hedor pestilente que se convierte en foco de contaminación.
La situación en La Victoria es complicada por el hacinamiento, dijo.
La clave
Construirían otro recinto
La penitenciaría Nacional de La Victoria, considerada el recinto más grande del país, fue fundada en el año 1952, bajo el gobierno del general Héctor Bienvenido Trujillo Molina, sin embargo, en el 2009 las autoridades anunciaron que sería trasladada a otra zona del país, donde se construirían modernas instalaciones, pero hasta el momento se sigue esperando.