María Del Mar Mejía Ruiz 
El doctor Román B. Brache, especialista en dermatología, define la dermatitis alérgica como el tipo de dermatitis por contacto en la que intervienen factores inmunológicos; en la que se han producido anticuerpos como respuesta a sustancias agresoras para la piel.
Se caracteriza por enrojecimiento del área afectada, edema (hinchazón) y prurito (picor) intenso; síntomas que van progresando a medida que persista la exposición.
Los tratamientos que se adoptan para tratar la dermatitis alérgica varían según la causa y la gravedad de la patología. Entre los más usuales se encuentran los antihistémícos, derivados de corticosteroides, vacunas, etc.
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«Los dermatólogos recibimos las dermatitis alérgica que son suscitadas por la exposición repetida a algunos tintes capilares de uso cotidiano; las prendas de fantasía (que contienen níquel); al cemento, por el cromo que contiene y con el que están en contacto diariamente los obreros de la construcción; y las dermatitis a los calzados -calipsos de goma- fruto de algunas sustancias que se emplean en la elaboración de estas prendas», dijo durante entrevista con el Hoy Digital.
El especialista recomienda utilizar prendas de algodón, que no tengan botones metálicos -que contienen níquel- ni prendas de fantasía. De igual modo, sugiere utilizar zapatillas de piel o de cuero, siempre que no sean sintéticas.
Se pueden incluir los tintes para el pelo y otros productos cosméticos, que deben estar certificados como con menor capacidad para provocar reacciones alérgicas. Esto por las autoridades correspondientes.
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«Mientras menos aditivos químicos o sintéticos usemos, tendremos menos posibilidades de reacciones alérgicas», agregó el dermatólogo.
Señaló la importancia de no automedicarse debido a que puede agravar los síntomas.
«En nuestra experiencia esto casi siempre lleva a un empeoramiento de la dermatitis».
Señaló que es imprescindible no caer en la tentación de ceder ante las numerosas ofertas de medicinas que circulan por las redes o entre familias y conocidos.
Con el calor y la humedad ambiental del verano son más frecuentes los problemas de piel. Hay un tipo de acné (espinilla) inducido por la humedad, la oclusión y el uso prolongado -sin descanso- de las máscaras.
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Las mascarillas pueden estar elaboradas con materiales capaces de desencadenar dermatitis. Pueden conseguirse en Internet algunas máscaras hipoalergénicas, esto es, con baja capacidad de dar alergias.
Algunas lociones que contienen óxido de zinc podrían ser útiles, en especial en las etapas iniciales.
Las dermatitis deben ser manejadas por el personal médico debidamente entrenado para ello.
