Derrame de cobre afecta comunidad campesina en Perú  

Derrame de cobre afecta comunidad campesina en Perú  

LIMA. AP. Un dirigente de una comunidad campesina del norte de Perú denunció hoy que la empresa minera que sufrió un derrame de concentrados de cobre que afectó a más de un centenar de pobladores, carece de equipos de contingencia para afrontar este tipo de accidentes.  

El derrame se produjo el 25 de julio por una rotura en el ducto de la empresa Antamina ubicada en el caserío Santa Rosa de Cajacay en la región Ancash, a 210 kilómetros al norte de Lima. La intoxicación afectó a los pobladores que apoyaron las tareas de contención del derrame para evitar que alcanzara el río, dijo Hilario Morán, presidente de la comunidad campesina.  

“Sin medir las consecuencias de lo que nos iba a suceder, hemos apoyado… nosotros así nada más hemos estado (con lo que tenían puesto) como si fuesen productos que no te iban a hacer daño a la salud… La empresa no tenía ningún equipo de contingencia”, declaró Morán a The Associated Press vía telefónica.  

Según la Dirección Regional de Salud de Ancash, en los cuatro días posteriores al derrame fueron atendidas 140 personas por presentar “síntomas irritativos ocasionados por la inhalación del tóxico”.  

La empresa dijo que 42 toneladas de concentrados de cobre pudieron ser contenidas en un pozo de emergencia pero no se pudo impedir que tres toneladas se esparcieran por el lugar. Según Morán, el derrame abarcó una extensión de 400 metros al borde del río y fue detenido a 100 metros de la orilla, provocando la pérdida de al menos 400 hectáreas de cultivos de papas y habas.  

El líder comunal relató que los pobladores colaboraron haciendo barreras para impedir que el denso líquido avanzara hasta el río Fortaleza y que poco después empezaron a reportar dolores de cabeza, vómitos y sangrado nasal.  

Morán dijo que unas 30 personas de la comunidad tuvieron que ser evacuadas a Huaraz, capital de Ancash, para ser atendidas. Los gastos fueron asumidos por Antamina, propiedad de un consorcio internacional conformado por la inglesa BHP Billiton, la suiza Xstrata, la canadiense TECK Cominco y la japonesa Mitsubishi Corporation.  

La oficina de AP en Lima trató de averiguar el número de personas que continúan internadas en la Clínica San Pablo de Huaraz, pero su director, Raúl Guisse, declinó dar información alegando que no estaba autorizado por sus superiores a dar declaraciones por teléfono.  

“Hay personas que siguen enfermándose día a día y siguen yendo a Huaraz… No sabemos qué componentes químicos contiene eso (el concentrado)”, manifestó Morán.  

El Ministerio del Ambiente anticipó que el sábado informará los resultados de los exámenes médicos practicados a los pobladores afectados.  

Antonio Mendoza, gerente de Medioambiente de Antamina, desestimó que la sustancia derramada “sea necesariamente tóxica”.  

“Se trata de una sustancia peligrosa en la medida que es una sustancia industrial… Son sustancias peligrosas que requieren un manejo adecuado, pero que no necesariamente son tóxicas”, dijo a la AP.  

No obstante, admitió que el concentrado contiene arsénico, azufre, sílice y plomo en cantidades que no precisó y que los pobladores que colaboraron para contener el derrame sólo utilizaron “paños absorbentes” para protegerse.  

“Esto es inmoral e irresponsable, ellos (Antamina) deberían conocer más”, dijo Greg Moller, un profesor de química ambiental y toxicología de la Universidad de Idaho, en referencia al reclutamiento de pobladores por la mina para ayudar en la limpieza del concentrado de cobre sin el uso de equipos protectores adecuados.  

Moller también cuestionó lo manifestado por el gerente de Medioambiente de Antamina.  

“Esto fue un episodio tóxico y estas personas están intoxicadas”, dijo, agregando que el concentrado de cobre alcalino podría dañar el tejido pulmonar causando quemaduras químicas.  

El profesor de toxicología dijo que entiende que la rotura del ducto de Antamina liberó una nube de concentrado, lo que podría haber creado una nube fina de las partículas tóxicas. “Hay una gran cantidad de productos químicos e irritantes físicos en esta mezcla”, dijo Moller a la AP.  

Mendoza aseguró que es la primera vez que ocurre un derrame de concentrados en cobre en Antamina. Sin embargo, Morán señaló que ha habido derrames de combustible en el pasado pero que fueron manejados rápidamente por la empresa.  

La representante de la Defensoría del Pueblo en Huaraz, Editha Rodríguez, reveló a la AP que los pobladores impidieron que se iniciaran las labores de limpieza hasta tres días después del hecho por temor a “borrar” las pruebas del derrame; pero al explicárseles el peligro al que se exponían accedieron a permitir los trabajos de limpieza. 

El incidente ocurre en momentos en que pobladores de la vecina región de Cajamarca rechazan el proyecto aurífero Conga por temor a la contaminación de sus fuentes de agua. El conflicto provocó hechos de violencia que dejaron cinco civiles muertos en enfrentamientos con la policía, lo que obligó al gobierno a declarar el estado de emergencia por un mes en tres provincias, que fue prorrogado el viernes por otros 30 días.  

Antamina, cuyo ducto tiene 302 kilómetros de extensión, es la mayor productora de cobre de Perú.  

La protección ambiental ha sido débil en Perú. El país no tuvo un ministerio del medioambiente hasta 2008 y el ministerio de Energía y Minas es el encargado de aprobar los estudios de impacto ambiental para proyectos mineros.  

José de Echave, director de la organización no gubernamental ambientalista Cooperacción, consideró al derrame de Cajacay como otro ejemplo de negligencia del gobierno. Dijo que las autoridades en los distritos mineros no están preparadas para manejar derrames y que las compañías mineras tienen planes de seguridad inadecuados.  

“Lo que estamos constatando con este derrame es que las empresas en sus zonas de influencia prácticamente se autorregulan, no hay un estado que esté presente que controle y fiscalice”, dijo De Echave a la AP.  

En el año 2000 en la localidad de Choropampa, en Cajamarca, un derrame de mercurio de la empresa Yanacocha, cuyo principal accionista es la estadounidense Newmont, afectó a cientos de pobladores que hasta la actualidad reportan dolencias de salud.  

Perú es el segundo productor mundial de cobre y el sexto de oro y sus exportaciones de minerales representan 61% del total de sus ventas al exterior.  

———   El periodista de The Associated Press Franklin Briceño en Lima colaboró con esta información.

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