Un día después de que una docena artistas y activistas cubanos que estaban atrincherados en una casa para protestar fueran desalojados por la policía bajo el argumento que violaron medidas contra el coronavirus, otro grupo de unos 70 creadores se presentaron a pedir explicaciones al Ministerio de Cultura.
Los miembros del Movimiento San Isidro, que habían permanecido por diez días en la sede, fueron sacados por las autoridades en la noche del jueves y el viernes las puertas del local estaban cerradas con candado, aunque permanecía una guardia policial al frente, constató The Associated Press.
Los jóvenes creadores demandaban la liberación del rapero Denis Solís, sentenciado a ocho meses de cárcel por insultar a un policía a comienzos de mes, y las medidas tomadas por ellos fueron escalando.
Varios anunciaron que realizaban una huelga de hambre. La AP no pudo comprobar de manera independiente este aspecto de la protesta.
Un video publicado en la web Razones de Cuba, afín al gobierno, mostró el momento en que policías y personas con batas médicas sacaban a los huelguistas, mientras el portal oficial Cubadebate informó que el operativo obedecía a que el escritor Carlos Manuel Álvarez Rodríguez, llegó de México y EEUU violó el protocolo