Hoy 
POR JUAN MARIA RAMIREZ
Hedores, enfermedades respiratorias y cutáneas y brotes de plagas arropan a seis barrios de la zona Norte del sector Guaricano, municipio Santo Domingo Norte, debido al desborde de las aguas cloacales que corren por las calles y de una cañada bordeada por viviendas de familias pobres.
El desbordamiento de las aguas cloacales se produce por el taponamiento de dos filtrantes, uno en la intersección de las calles Radial con Respaldo Comate, en el barrio Los Chalecitos, y otro en la calle Duarte.
Los barrios afectados, además de Los Chalecitos, son Brisas del Norte I y II, Independiente, Somito y Las Palmeras, mientras que por el filtrante tapado en la calle Duarte son afectados residentes en los sectores Mirador Norte I y II.
Una iglesia cristiana ubicada en la calle Duarte esquina 7, en el Mirador Norte, ha tenido que disminuir los servicios religiosos, debido a que los hermanos no aguantan la pestilencia.
Yenny Damaris manifestó que desde hace tres meses padecen los efectos de las aguas cloacales, a tal punto que hasta a los fregaderos de las cocinas se tapan y no se puede estar en las casas.
Reporteros de HOY que visitaron la zona comprobaron que el hedor es insoportable, mientras los niños caminan descalzos sobre las aguas contaminadas sin que sus padres se inmuten, pese a que las enfermedades de la piel afectan principalmente a éstos.
Cientos de familias viven en los barrios señalados y los más indefensos tienen que ser trasladados de la zona para lugares seguros hasta que baje la marea de las aguas cloacales que despiden los malos olores. Petronila Paniagua, de 84 años, quien vive en la calle Radial número 28, tiene que ser sacada diariamente de su hogar porque no puede respirar debido al hedor.
Cándida de la Cruz, quien reside en la calle Mirador Sur, al lado de la cañada, explicó que ayer pensaba que todos en la casa se iban asfixiar y que a su madre que estaba de visita hubo que sacarla para evitar que se mareara.
Mi pobre vieja estaba sin sitio. No encontrábamos qué hacer. Esto es insoportable, expresó De la Cruz desde la galería de su casa.
Diomedes Sánchez, una anciana que no recuerda su edad, pero dice que pasa de 80 años, vive en la calle Comate 39, salió de su casa frente al filtrante tapado para mostrar los problemas de su piel, que también afectan a tres de nietas.
Hemos ido a médicos y comprado todo tipo de jabones, pero no hay forma de que esta rasquiña se sane. Ya hemos tenido que recurrir a los cepillos, porque las uñas no dan abasto, explicó.
Las nietas de Sánchez con afecciones en la piel son Fraideliz y Lucidania Sánchez, de 14 y 15 años, quienes tienen que despojarse de la ropa cuando el calor ataca.
El drenaje sanitario se tapó hace varias semanas y no ha habido forma de que las autoridades acudan a resolver el problema, según Danny Marte, presidente de la Asociación de Juntas de Vecinos, y Felipa Frías, dirigente comunitaria.
Explicaron que el pasado lunes acudió una brigada de la Corporación de Acuedcuto y Alcantarillado de Santo Domingo (CAASD), pero sin los equipos suficientes para resolver el problema. Dijeron que lo poco que lograron sacar de los filtrantes lo vaciaron en la cañada a pocos metros, lo que provocó que el mal se expandiera.
El Ayuntamiento de Santo Domingo Norte ha prometido ayudar a resolver la insalubridad, mientras tanto siguen padeciendo los afectos de la contaminación del ambiente.
