La descarbonización, IAQ (calidad del aire interior por sus siglas en inglés) y digitalización. Son señaladas como las tendencias principales que remodelarán la industria HVAC (calefacción, ventilación y aire acondicionado).

Cuando se trata de descarbonización, hay indicadores que muestran su impacto: estudios recientes han señalado que las empresas con mejores antecedentes de ESG (factores ambientales, sociales y de gobierno corporativo) produjeron rendimientos financieros más altos a tres años. Mientras, el compromiso de las empresas se ha visto reflejado en la lista de las Fortune 500. En donde más del 60 % de ellas establecieron sus propios objetivos de acción climática y reducción de CO2.

En este apartado los edificios ocuparán un lugar importante. A nivel mundial, las instalaciones comerciales y los hogares consumen el 40% de la demanda de energía. Además son responsables de un tercio de las emisiones globales de gases efecto invernadero (GEI). “Aunque las demandas puedan variar, habrá una presión creciente para reducir el uso de energía y las emisiones. Y los edificios de alta eficiencia y los equipos HVAC son los medios clave para ese fin”, asegura Milena Santos, directora de marketing estratégico y producto unitario de Daikin.

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La calidad del aire que respiras importa

La segunda macrotendencia, IAQ o calidad del aire interior, siempre ha sido importante, pero la pandemia la puso en el centro de atención y ya se miran nuevas formas de evaluar los sistemas HVAC, entendiendo como insuficiente medir solamente el confort térmico, temperatura y humedad. Tal es así que se espera que el mercado de medidores de calidad del aire crezca USD 1600 millones entre 2020 y 2025.

“Comodidad, seguridad, bienestar, son algunas de las nuevas métricas que se imponen. A estas alturas estamos de acuerdo en que una mejor calidad del aire produce mejores beneficios”, dice Daikin, un líder en climatización. De hecho, la mayoría de los Nueve Fundamentos de un Edificio Saludable identificados por la Escuela de Salud Pública de Harvard tienen una conexión directa con HVAC.

El aire interior está entre 2 y 5 veces más contaminado que el exterior. Según varios estudios entre los que se encuentra el de la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA). Y es que, en el interior de los edificios que más frecuentamos (viviendas, oficinas, lugares de ocio, escuelas…) podemos encontrar múltiples fuentes de contaminación. Los cuales pueden ser tanto de elementos presentes en el interior, como otros compuestos que provienen del exterior.

La exposición prolongada a la polución interior puede causar problemas en nuestra salud, especialmente en los niños. Investigaciones demuestran que, por ejemplo, los niños en salones de clases con mucha ventilación de aire exterior tienden a lograr puntajes más altos tanto en matemáticas como en lectura.

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La digitalización

La tercera macrotendencia, la digitalización, involucra todos los datos que se crean y se crearán como resultado de sensores que miden todo en nuestro entorno.

La cantidad de datos creados en los próximos tres años será mayor que los datos creados en los últimos 30 años, lo cual es realmente asombroso”, dijo. “Esos datos provienen de sensores, que pronto superarán a todos los demás tipos de datos. Los sensores de IoT están midiendo casi todos los aspectos del mundo físico: nuestros cuerpos, nuestros hogares, nuestros automóviles y, sí, nuestros edificios y equipos HVAC”, ha dicho Daikin.

“Convertir los datos en conocimientos prácticos y procesables para transformar los procesos y mejorar el rendimiento. La conclusión es que las empresas que pueden convertir los datos en flujos valiosos tendrán una ventaja y podrán acelerar los esfuerzos para reducir el impacto ambiental y mejorar la calidad del aire interior”.

Reducir las emisiones de carbono, aumentar la IAQ y mejorar los resultados a través de los datos deben ser tres acciones relacionadas entre sí, capaces de responder a las expectativas y retos de los tiempos que están por venir.