El desempleo en República Dominicana podría aumentar entre 17.7 y 22.7% más en este año, es decir entre 407,711 y 667,690 personas desempleadas por la caída de la economía por el COVID-19, según estimaciones del Centro Regional de Estrategias Económicas Sostenibles (CREES).
El vicepresidente ejecutivo del CREES, Ernesto Selman explicó que estas estimaciones incluyen tanto a trabajadores formales e informales, lo que sería un duro golpee para las familias dominicanas, por eso abogan por reformas estructurales en la economía.
“Creemos que el empleo tendrá un duro golpe este año y que no se resuelve con las medidas asistencialistas de 60 días que ha tomado el Gobierno. La pobreza no se reduce con la Tarjeta Solidaridad sino con empleos productivos y aquellos que agregan valor”, expreso durante una conferencia de prensa online.
Selman resaltó que los únicos aspectos positivos que tiene el país en estos momentos son el ahorro significativo en la factura petrolera y mayores exportaciones de oro porque el precio es más alto.
Pero como aspectos negativos citan: menos exportaciones por la caída de la demanda internacional, así como distorsiones en las cadenas de producción; caída del sector turismo, que es uno de los principales generadores de empleos y divisas; menos remesas de los inmigrantes dominicanos; menor Inversión Extranjera Directa (IED) por las recesión a nivel mundial y una alta dependencia de flujos de divisas por colocaciones de deuda soberana en mercados internacionales.
Selman indicó que la generación de divisas se podría reducir entre US$6,865 a US$9,957 millones menos en este año, por la caída en los recursos que provienen de las exportaciones, el turismo, las remesas y la IED.
Expresó que estas cifras tienen un peso importante para el país pues las reservas internacionales son entre US$8,000 y US$9,000 millones. En otro orden, el economista resaltó que además los ingresos fiscales podrían caer entre 27.6 y 25%, es decir entre RD$475,488.4 millones y RD$492,539.6 millones.