Al entrar un nuevo año, son muchas las llamadas y los deseos de prosperidad y de felicidad que se desea el uno al otro. La nación y nuestros gobernantes también necesitan que le auguremos los mejores éxitos, sobre todo cuando se avizora la necesidad del pago de una creciente deuda externa y se comenta de un aumento de la informalidad en las recaudaciones tributarias.

Ciertamente, es el tiempo, sin dejar de hacer las cosas terrenales, de poner la mirada en las cosas de arriba, en el señor Jesucristo, en el Dios todopoderoso, a fin de que ofrezca la sabiduría necesaria para continuar con éxito las políticas públicas. Pero para que asegurar a todo el que cree en Jesús la salvación y la vida eterna en el reino de los cielos.

El sector agrícola para el mercado de exportación necesita aumentar su rentabilidad y ser más competitivo, como lo expresara el empresario Félix García ante la Junta Agro Empresarial Dominicana. El sector agrícola dominicano debe ser más competitivo, que tengamos políticas públicas que permitan que el país pueda aumentar sus exportaciones al mercado centroamericano, y yo diría también a los demás mercados del mundo. Que seamos menos importadores y un poco más exportadores.

En Corea del Sur visité un instituto de investigación de alimentos al que interesé y con el que se hizo un acuerdo de cooperación con el CEI-RD de la República Dominicana para mejorar los productos agrícolas dominicanos, mejorar su competitividad, y hasta su presentación y empaque. Pero parece que nada pasó de ahí.

El problema haitiano, de cómo mejorar el mercado con esos vecinos, y manejar el tema de la aplicación de la sentencia migratoria requiere de una política sabia y una diplomática más creativa.

El país asume por primera la sede del SICA en este primer semestre del año 2014. Cuando representé el país en las cumbre del SICA/Corea creo que en el 2007, se presentó la oportunidad de realizar seminarios de inversión para promover la atracción de inversiones asiáticas. En ese entonces, como el país no era miembro activo de ese foro, no podía ser la sede de esos seminarios, pero ahora sí podría hacerlo. Es importante la promoción del país para que sea sede de eventos internacionales que promuevan una mayor atracción de inversiones que ayuden a la gobernabilidad de la nación.

Mientras tanto, mis mayores deseos para este nuevo 2014, se basan en el pasaje de la biblia de 1 tesalonicense, que dice: Que el mismo Dios de paz os santifique por completo; y todo vuestro ser – espíritu, alma y cuerpo – sea guardado irreprochable para la venida de nuestro Señor Jesucristo. Fiel es el que os llama, el cual también lo hará.