Buenos Aires. EFE.- Un juez federal desestimó hoy una denuncia contra la presidenta de Argentina, Cristina Fernández, y funcionarios de su Gobierno por presunto entorpecimiento de la investigación por la muerte del fiscal Alberto Nisman, quien denunció a la mandataria por encubrimiento a terroristas.
El juez Ariel Lijo rechazó por “inexistencia de delito” la demanda del periodista argentino Cristian Sanz contra Fernández por los supuestos delitos de abuso de autoridad e incumplimiento de deberes de funcionario público, informó la agencia oficial Télam.
A juicio de Lijo, “no existen argumentos sólidos” para sostener la acusación.
La denuncia fue presentada el pasado 6 de febrero y alcanzó también al jefe de Gabinete argentino, Aníbal Fernández, a la procuradora general (fiscal jefe), Alejandra Gils Carbó, y al secretario de Seguridad, Sergio Berni.
Sanz acusó a la mandataria argentina de “ostentar una conducta temeraria” al haberse decantado públicamente por la hipótesis del suicidio y pocos días después por la del asesinato “ensuciando la investigación judicial” sobre la muerte de Nisman.
Además, el periodista denunció a los citados funcionarios por “arrojar sospechas” contra agentes desplazados de la Secretaría de Inteligencia y contra el colaborador del fiscal que le prestó el arma que puso fin a su vida, Diego Lagomarsino.
Nisman, que investigaba el atentado de 1994 contra la mutualista judía AMIA, fue encontrado muerto de un disparo en la cabeza en su apartamento el 18 de enero, cuatro días después de denunciar a la presidenta argentina, por presunto encubrimiento de los iraníes acusados de ese acto terrorista.
Gerardo Pollicita, el fiscal que tras la muerte de Nisman, en circunstancias aún no aclaradas, asumió su denuncia, apeló la decisión del juez Daniel Rafecas que frenó una posible investigación sobre el presunto encubrimiento por parte de la presidenta y algunos de sus allegados de los sospechosos del atentado a la AMIA.