POR ADALBERTO DOMINGUEZ
NUEVA YORK.- Las calles y avenidas de la Gran Manzana se visten hoy de los colores blanco, azul y rojo, de la bandera dominicana, con motivo de la celebración del XXIV Desfile y Festival Estatal Dominicano a lo largo de la   Sexta Avenida, en Manhattan.

El desfile es para conmemorar un nuevo aniversario de la Restauración alcanzada por la nación dominicana el 16 de agosto de 1863 luego de la independencia de 1844.

Nelson Pena, presidente del comité organizador del Desfile Dominicano de Nueva York, estaba bastante ocupado ayer tarde en los preparativos finales del evento en el que se estima participará la mayor cantidad de dominicanos anualmente.

La bandera dominicana ondeaba desde ayer en las antenas de carros y otros tipos de vehículos de motor que se desplazaban por calles y avenidas de la ciudad, especialmente en sectores del alto Manhattan, como Washington Heights, donde se estima reside la mayor cantidad de criollos en la ciudad. Parecía como si se estuviera en un “pedazo” de Quisqueya al escucharse, además, merengue, bachata y salsa cuando no el reggaeton desde algunos apartamentos ubicados en distintos niveles de edificios de la zona.

El alcalde Michael Bloomberg confirmó ayer tarde en una comunicación enviada a este periódico a través de su oficina de relaciones públicas su participación en el desfile en el trayecto de la Sexta Avenida comprendido entre las calles 35 y 62 con Central Park, donde los hijos de “Quisqueya la Bella” celebran a lo grande el orgullo de su herencia, y la Independencia y la Restauración de su país de origen.

El pasado viernes fue realizado el “Banquete de Gala” en el hotel Marriot Marquis de Manhattan con la participación de las reinas y virreinas, padrinos, madrinas y mariscal del desfile y autoridades locales y de la República Dominicana en Estados Unidos.

Unas 51 carrozas desfilarán con temas alusivos a la hermosa isla del Caribe exponiéndose su folclor, cultura, tradiciones y su espíritu de orgullo patrio de los dominicanos.

En el desfile que este año es dedicado al Club Deportivo Dominicano, fundado el 30 de marzo de 1966, contara con orquestas, figuras de medios de comunicación social, agrupaciones deportivas, carnavalescas y folclóricas, así como organizaciones sin fines de lucro.

En la víspera del desfile de este domingo, se realizó ayer el 21 festival en la avenida Ámsterdam a esquina calle 191, en Washington Heights, el cual contó con la presencia de la presentadora de Noticias 41 de Univisión, y madrina internacional del desfile.

Además del alcalde Bloomberg participarán otros funcionarios municipales, estatales y federales de Nueva York, entre ellos concejales y asambleístas así como presidentes de condados de la Gran Manzana.

El padrino del desfile esta vez será el empresario Carlos Gómez.

Según estadísticas oficiales, para el ano 2000 en Estados Unidos había 1,041,910 dominicanos, pero desde entonces al día de hoy esas cifras se han incrementado.

A diferencia de esos datos arrojados por el Censo 2000, en el Censo efectuado en 1990 se determinó que había entonces 520,121 dominicanos en territorio norteamericano.

En el Alto Manhattan residen unos 63,700 dominicanos que sumados a los 16,700 que viven en Hamilton Heights y a los 15,500 en Inwood representan el 26 por ciento de los domiciliados en la metrópoli.

Con el actual ritmo de crecimiento de la población los dominicanos superarán en número a los cubanos antes del 2010 ubicándose en el tercer grupo de hispanos más grandes del país luego de los mexicanos y los puertorriqueños, conforme aun estudio del Instituto de Estudio dominicano, presidido por la socióloga Ramona Hernández.

La colonia criolla se enorgullece en estar representada en cargos públicos importantes por gente de su etnia, como muestra de su crecimiento, su dedicación al trabajo y su esfuerzo de superación académica, económica y cultural.

Los dominicanos tienen en la Asamblea Estatal de Nueva York a Adriano Espaillat, de Manhattan; y José Peralta, de Queens; y en el Concejo Municipal a Diana Reyna, de Brooklyn; y Miguel Martínez, de Manhattan; y a Guillermo Linares como comisionado de la Oficina de Asuntos de Inmigración de la Ciudad de Nueva York, así como a empleados en la Gobernación y la Alcaldía.